La interventora municipal de Xàtiva ha vuelto a reprender al equipo de gobierno por saltarse el procedimiento establecido para las contrataciones menores, una cuestión que debía quedar desterrada tras el endurecimiento de los controles impuestos con la crisis. El consistorio aprobó en el pleno del pasado jueves el reconocimiento extrajudicial de créditos de 2014, el último de la legislatura. Aunque el volumen de la relación de facturas al margen del presupuesto „34.484 euros„ resulta insignificante si se compara con el que solía ser habitual hace unos años, el informe de intervención que acompaña el expediente deja claro que el consistorio «ha vulnerado la legislación» al contraer obligaciones sin consignación; es decir, sin plantear una retención previa del gasto.
Al margen de que gran parte de los recibos responden a «necesidades sobrevenidas de difícil aplazamiento» „como el arreglo de fugas, el suministro de gasolina a Protección Civil o la reparación de vehículos„ y de que todos los pagos tienen la conformidad de los empleados responsables de cada servicio, que validan la efectiva realización y el pago de la obra, la técnico pone el foco en que se han llevado a cabo contrataciones «sin seguir el procedimiento establecido», un proceder que considera «viciado de nulidad de pleno derecho». Se trata, eso sí, de «casos muy puntuales». La interventora advierte de que en los contratos menores de obras «no basta con la mera existencia de crédito», sino que «precisan de la redacción y aprobación de una memoria valorada», inexistente en el caso de una de las facturas de la relación. Un total de cuatro se emitieron sin que previamente el ejecutivo pidiera ofertas a tres empresas, pese a que el gasto superaba el umbral definido por la ley.
Una firma de consultoría que trabaja de manera asidua tanto para la administración local como para el Consorcio de Residuos factura tres de los 17 pagos abonados por importe de 9.142 euros. Uno se vincula a la redacción de un informe de sostenibilidad económica del PAI Ferrocarril que, según el edil de Hacienda, Ramón Vila, la Generalitat encargó a Xàtiva «de hoy para mañana» y otros dos estudios están relacionados con el proyecto de la futura biela de conexión entre la N-340 y la CV-41. Cristina Suñer subrayó que el consistorio tiene un área de urbanismo «sobredimensionada en la situación actual» que, a juicio de la portavoz de Compromís, podría haber elaborado estos planes, cuya orden de pago pone en cuestión. El reconocimiento salió adelante con los votos en contra de la oposición. Roger Cerdà (PSPV) acusó al ejecutivo del PP de dejar fuera del expediente 200.000 euros pendientes con Egevasa por la adquisición de agua del depósito de la Bola. «Los tienen escondidos en los cajones para que cuadren las cuentas», dijo. Vila puntualizó que esas facturas «hay que trabajarlas» porque «el ayuntamiento tiene la obligación de apurar para pagar lo menos posible».
9.000 ? en informes urbanísticos
El regidor remarcó que, para un presupuesto de casi 28 millones, el porcentaje de facturas sin consignación es irrisorio. El alcalde, Alfonso Rus, retó a la oposición a citar un ayuntamiento que, con un presupuesto similar, cerrara 2014 con solo 34.000 euros en reconocimientos extrajudiciales. Cerdà respondió que en Ontinyent la cifra aprobada era diez veces inferior: 3.400 euros.
