El pequeño municipio de Estubeny (124 habitantes) ha alzado la voz para reclamar a la Conselleria d'Educació un autobús escolar para desplazar a los niños a los colegios. La localidad, sin escuela, tiene cuatro niños en edad escolar, que acuden a centros de Enguera y Anna. La falta de un vehículo escolar obliga los padres a trasladar todos los días los niños al colegio en coches particulares y los progenitores piden un servicio de autobús que lleve a sus hijos a las escuelas.
El alcalde de Estubeny, Ramón Blanquer, explicó ayer que «hace unos años pasaba un autobús que llevaba a otros niños de otras localidades, pero ahora estos van a los colegios de sus pueblos y los de Estubeny se han quedado sin servicio». El primer edil señalaba que antes de comenzar el curso escolar mantuvo una reunión en la conselleria para exponer el problema y pedir soluciones. Pero las respuestas de la administración valenciana no son nada esperanzadoras para los padres. Blanquer explicó ayer que «la conselleria concede una subvención de 350 euros a cada alumno para el desplazamiento, pero el problema es que de los cuatro niños en edad escolar, dos son menores de 6 años, etapa en la que la escolarización aún no es obligatoria y no reciben la ayuda», expuso.
El alcalde manifestó que «los 700 euros que perciben de ayuda dos de los alumnos no son suficientes para sufragar un vehículo escolar». «Estuvimos mirando el presupuesto para un vehículo-taxi, pero rondaba los 3.000 euros», cantidad inasumible para el municipio y los padres, algunos de ellos con dificultades económicas y situaciones familiares complejas, remarcó ayer el primer edil.
Ante esta situación, el alcalde manifestó ayer que el ayuntamiento pone a disposición de los padres el vehículo cedido por la Diputació de València. Algunos padres han criticado que «familiares de concejales utilizan el coche de Sona la Dipu para llevar a sus hijos al colegio, para uso personal», mostrando su queja por «el trato de favor» a ciertos vecinos. El alcalde negó ayer esos «favoritismos» y aseguró que «el coche está disponible para todos, quien lo pide puede utilizarlo», zanjó Ramón Blanquer.
Algunos padres también habían manifestado sus quejas por la «inoperancia» del gobierno local en solucionar el problema del autobús escolar y Ramón Blanquer instó a los padres a «ejercer presión» ante la conselleria para encontrar soluciones. «Desde el consistorio poco podemos hacer. Nos reunimos en la conselleria en agosto, antes de comenzar el curso, para plantear el tema y buscar soluciones».
Pueblo aislado
El alcalde de Estubeny también puso de manifiesto el «perjuicio» que supone para la pequeña localidad, que escasamente supera el centenar de habitantes. «Situaciones como esta nos aislan aún más. Aquí la gente se va por la falta de estos servicios», exponía el primer edil. El reducido número de niños en edad escolar imposibilita la creación de un colegio rural en la localidad —no hay escuela desde hace más de 40 años, recordaba Blanquer— y los padres, con dificultades para trasladar a sus hijos a los colegios de otros municipios piden ahora ayuda.
