Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

a posteriori

últimos en segunda B

l Olímpic, inferior técnicamente, sucumbió 0-2 ante el Sabadell, desperdiciando la oportunidad de encaramarse hasta el puesto décimo de la tabla. Por si fuera poco, al vencer el Llosetense marcando 3 goles al Levante nos deja siendo el último equipo de los 80 que componen los 4 grupos de la Segunda B en cuanto a goles marcados. Todo un récord.

El Olímpic, como se ha comentado otras veces, tiene capacidad para el trabajo de campo pero está pésimamente estructurado. Comenzando por el entrenador Fernández Romo que no es válido ni para dirigir el equipo ni para seleccionar los futbolistas que necesitaba para componer un Olímpic suficiente para desenvolverse por la media tabla con cierta holgura.

Ante el Sabadell, el señor Fdez. Romo utilizó 3 delanteros centro tamaño XXL, Javi Navarro, de quien dijo iba a ser un gran goleador; Samu, que vino de la Mancha el año pasado; y un debutante Borja Rubiato, todos de buena talla y con fecha próxima de caducidad en cuanto a edad. Debutó San Julián, otro XXL cuyo perfil de hombre de cierre no es lo que necesita el equipo, jugador que siente debilidad, según informes que nos llegan de varios equipos de los que procede, por la acumulación de tarjetas, tanto amarillas como rojas. Hizo honor a semejantes informes en el minuto 76, que fue expulsado.

Con todo este bagaje, en principio parecía que el equipo había mejorado comparado a partidos anteriores, pero fue un espejismo. Seguíamos sin pisar el área contraria de forma adecuada, absolutamente sin remate permitiendo por nuestro lado izquierdo una perfecta triangulación de los visitantes con pase de la muerte incluido y remate inapelable en la boca del gol. Era el minuto 37 y ahí se acabó el partido. Los años y las malas maneras salieron a relucir y el equipo comenzó a desinflarse sin que el náufrago señor Fernández Romo supiera como reflotar el barco. Los jugadores, conscientes de que no podían enderezar el rumbo, perdieron los papeles y se fueron todos arriba, en inferioridad numérica permitiendo a los de Sabadell sentenciar con un segundo gol que acabó por amargar la tarde tanto a los mayores como a los niños llegados de la mano de sus progenitores, invitados especialmente para rellenar la grada.

Compartir el artículo

stats