El 29 de junio de 2015 se celebraba el pleno constituyente de una nueva Mancomunitat de Municipis de la Vall d'Albaida. En dicha sesión, el alcalde de La Pobla del Duc, el socialista Vicent Gomar, resultaba elegido como presidente al ser avalado por la totalidad de alcaldes y concejales socialistas de la comarca.
Hace un año que asumió los grandes retos de la Mancomunitat, ¿Cuál ha sido la prioridad, dada su delicada economía?
Una de las principales prioridades ha sido afrontar con muchos municipios su deuda histórica con la Mancomunitat, así como la deuda generada por incumplir las obligaciones mensuales, ya que esta actitud es totalmente insolidaria con los demás municipios cumplidores y genera problemas financieros y de gestión, que no tienen nada que ver con el día a día de la mancomunidad.
El sistema de financiación sigue siendo una calamidad, a expensas del capricho o seriedad del alcalde de turno. Recientemente se ataba la deuda de Castelló de Rugat ¿Qué medidas hay previstas al respecto, y en particular sobre la escandalosa deuda de Albaida?
Estamos en negociaciones. Las poblaciones que más deben actualmente son Albaida, Aielo de Malferit, Benissuera o Montaverner. Estamos ayudando a que algunos ayuntamientos se acojan a un plan de pagos. Hacemos planes personalizados para que muchos ayuntamientos los aprueben y los apliquen. Pero esos planes elaborados por nuestros técnicos, aún no han sido aprobados por un ayuntamiento como el de Albaida. También seguimos ofreciendo alternativas a los demás. Es importante la búsqueda de una solución urgente ya que sin solución se contribuye a prolongar nuestras deudas con terceros.
¿En qué medida, tanta irregularidad financiera, está afectando a los servicios básicos que presta la mancomunidad?
Desde que nosotros entramos a gobernar se están pagando todas las facturas giradas por la empresa concesionaria del servicio de recogida de basuras. Ahora bien cuando llegamos existía un déficit acumulado, eso repercute en la empresa Recisa, que está sufriendo esa falta de liquidez. Por eso apelamos a la solidaridad de los ayuntamientos deudores y estamos trabajando activamente en dar una solución definitiva.
¿Se está avanzando en la creación de la figura de un gerente que controle, coordine, supervise o racionalice, los servicios que desempeñan?
De momento no lo contemplamos, ya que su creación significaría un gasto más. Lo que actualmente existe es una implicación de cada miembro de la comisión de gobierno, que dedica más tiempo que nunca a atender las necesidades de su área delegada. Estamos intentando profesionalizar al máximo la gestión, esta necesita tiempo, el que le dedican los miembros que disponen de áreas delegadas, concretamente los miembros del PSPV y PP, ya que Compromís rechazó las delegaciones ofrecidas.
Otro gran reto es la recuperación del Pla de Minimització de Residus. ¿Han habido movimientos y hay voluntad política de resolverlo o fecha?
Han pasado 17 años sin que se ponga en marcha este plan que era pionero, ya que si bien sí se cumplió la primera parte de la recogida, no ocurrió lo mismo con la segunda fase dedicada a crear una planta de tratamiento. Después se intentó integrar o forzar la integración de nuestro proyecto en el COR, generándose sucesivos pleitos judiciales. Ahora, tras el cambio de gobierno en la Generalitat, los cambios que impulsa la Conselleria, son instalar una planta de transformación en la Vall, más otras dos en otras comarcas, y un vertedero en Zarra. Tras ofrecerse Bufali para albergar la planta, han surgido recelos, caso de Montaverner. Considero que el concepto de planta ha cambiado...
¿En qué modo?
El modelo que se quiere para esta comarca es la mitad que la planta de Algímia, cuyas instalaciones han sido aprobadas por todos y son ejemplo para el COR y para las plataformas. El Pla de Minimització es el modelo que ahora mismo la conselleria pretende que se aplique en el resto de comarcas. Los temores salen del proyecto que Recisa presentó en su día en el ayuntamiento de Bufali, pero que no se seguirá aquel planteamiento, ya que el vertedero de Bufali será en Zarra.
La Ley de comarcalización que anuncia la Generalitat ¿Con qué expectativas se contempla?
Hay un tema previo, y es que si la Mancomunitat pudiese tener la capacidad ejecutiva que tienen las diputaciones sería un buen paso de cara a generar tasas, como en el caso de la recogida domiciliaria de basura. Quien mejor sabe lo que sucede en la comarca es la Mancomunitat. Ya sea en materia de carreteras, bienestar social... Sucede, en esos momentos y con la no aplicación real de la ley de reforma de las administraciones, que los servicios se siguen transfiriendo y son ejecutados por los ayuntamientos, hasta el punto de saturarlos, entonces como las poblaciones menores no pueden cubrir servicios, caso del de policía local , y otros ¿Por qué no crearse y prestarse ese servicio desde la Mancomunitat?
En cultura se dan multitud de manifestaciones: Mostra de Titelles, Premi Eròtic, Dansà?¿Las perspectivas son crecientes?
La tendencia es creciente. Además de mantenerlas, tenemos el reto de hacer que dichas manifestaciones lleguen a la gente. El premio de literatura no puede quedarse solo en las fotos y la gala, sino que además tiene que dinamizarse con presentaciones, llevando a las bibliotecas las obras premiadas... La expansión en esta nueva etapa es evidente, este mes han comenzado los Contes a la Fresca, una iniciativa que recupera nuestra cultura más directa. También resaltaría la apuesta por hacer posible que el Premi de Literatura Eròtica sea anual.
¿Cuál es el futuro del Projecte Trévol? ¿Tiene sobredimensionada la plantilla como se dice?
La conselleria acaba de autorizar una ampliación de 12 plazas más, además de asumir nuestro modelo de gestión que va a más. En términos de servicios es complicado decir que una plantilla está sobredimensionada o no, nunca será suficiente para atender las necesidades de personas con discapacidad y sus familias. En el Trèvol se está trabajando, se está estudiando cada situación, se han generado nuevas bolsas de trabajo y se están buscando alternativas a todos los problemas.
Háblenos de turismo.
Las actividades que ha venido realizando esta área están muy bien, pero son insuficientes para la mancomunidad que queremos. Por eso estamos negociando un nuevo plan operativo, a tres años, con la Diputación y la Generalitat. Queremos un plan que busque marca y resultados; que ponga lógica en la proyección de la Vall, instalarnos en el pensamiento de los operadores y ofrecer la gran oferta turística de la que disponemos. Nos faltan muchas cosas que queremos conseguir. Tenemos una comarca que como digo muchas veces está por descubrir, que históricamente no ha recibido un apoyo directo de las instituciones.
¿Y la Unida de Prevención de la Drogodependencia?
Está teniendo un funcionamiento excepcional, recorriendo todos los institutos de la Vall. Es un servicio que hay que mantener y que se está mostrando eficaz, haciendo una labor con los jóvenes impresionante.
¿En materia de deportes?
Desde la mancomunidad además del Circuit de Carreres Populars y la promoción de la pilota estamos estudiando nuevos modelos de gestión del deporte. Estamos gestionando el fútbol no federado, o atendiendo la implantación del pádel, además de mantener la expansión de la pelota valenciana. También estamos abiertos a nuevas iniciativas como la promoción del deporte femenino o la promoción de deportes minoritarios..
¿Agricultura?
Tenemos pocas competencias en esta área. Lo que sí hacemos es promover campañas. Las instalaciones de la mancomunidad esta a disposición de todos los agentes del sector. Es importante dotar de contenido esta área y gestionar la promoción de los productos locales. Hay que apoyar a las cooperativas y a los productores.
¿Cómo está el Museu Comarcal d'Etnologia de Benissoda?
El museo, desde el cuatrienio anterior, tiene cedida su gestión al Ayuntamiento de Benissoda.
