La Sindicatura también detectó el pago de 32.000 euros en dietas sin justificar cobradas por el exalcalde y varios ediles de Castelló de Rugat. Una irregularidad que avanzó este diario y que Barranca niega. «Nunca se ha pagado ninguna dieta sin estar justificada. Alguien ha hecho desaparecer los justificantes para hacerme daño», afirma el exalcalde, que no descarta que se trate «de fuego amigo» tras la guerra interna del PP local. Barranca sostiene que la auditoría solo constata «defectos de forma» que atribuye a la escasez de personal y a que el exsecretario municipal «tenía una forma de funcionar de hace 30 años».