Después de los primeros fibers que llegaron a lo largo del fin de semana a Benicàssim y que se alojarán durante estos días en alguno de los hoteles o campings del municipio, la primera ola grande de asistentes tuvo lugar ayer con motivo de la apertura de las zonas de acampada del festival. Tal y como informaron desde la organización a última hora de la tarde de ayer, miles de «fibers» acudieron ayer a por su pulsera acreditativa que les da derecho a a disfrutar de una semana completa en la zona de acampada y de los cuatro días del festival que comenzará el próximo jueves y se prolongará hasta el domingo.

Tanto Campfest (con unas 20.000 plazas) como Villacamp (esta última de pago y en la zona norte del municipio y con unas 1.500 plazas) abrieron sus puertas a las nueve de la mañana y durante las primeras horas del día la zona de cambio de pulseras ubicada en los exteriores del recinto de conciertos no contó con grandes colas puesto que la llegada de fibers fue un poco a cuentagotas. Desde la organización explicaron que el grueso de fibers llegará al municipio durante la jornada de hoy martes y la del miércoles, porque, según explicaron, cada año hay «más equilibrio» entre público nacional y británico, «y los españoles tardan más en venir». «Estamos prácticamente al 50 %, como el año pasado; antes, cuando el público mayoritario era del Reino Unido, se instalaban antes», añadieron desde la organización.

Coincidiendo con la llegada de algún tren a la localidad entorno a las 13 horas, la zona congregó a más gente ya que, como cada año, este medio de transporte es una de las opciones más escogidas por los jóvenes para llegar a Benicàssim.

Ya instalados en la zona de acampada en la que se alojarán durante una semana, los asistentes disponen de dos días completos para disfrutar del municipio antes de que comience a sonar la música en el recinto del festival. Hasta el jueves, los fibers van a poder mitigar el calor en la playa y disfrutar de la gastronomía local.

40.000 asistentes diarios

La vigésima segunda edición del Festival Internacional de Benicàssim espera volver a sus mejores niveles de público, los registrados en 2011, con 40.000 asistentes diarios previstos de viernes a domingo, gracias en parte a un cartel encabezado por Muse y un espectáculo único de The Chemical Brothers.

Por el recinto de conciertos pasarán también nombres como Kendrick Lamar, Jamie XX, Massive Attack, Major Lazer, The Vaccines, La Habitación Roja, The 1975, DJ Shadow, Dorian, Echo and the Bunnymen y Bloc Party.

Durante el día de ayer empezó también a funcionar parte del dispositivo de seguridad, que durante los próximos días integrará 1.600 servicios entre Policía Nacional, Policía Local, Guardia Civil, seguridad privada, bomberos, Cruz Roja y Protección Civil, cuyos efectivos velarán por la seguridad de los 140.000 asistentes previstos.

Por último, con motivo de la apertura de las zonas de acampada, se puso en marcha durante el día de ayer un servicio extraordinario de bomberos, que se ampliará a 24 horas a partir del jueves 14, cuando empiecen los conciertos.