Los agentes de la Policía Judicial que investigan el presunto saqueo de fondos del Instituto Tecnológico de la Óptica y la Imagen (Aido) sospechan que supera los doce millones de euros, según confirmaron a Levante-EMV fuentes cercanas al caso. El juez mantiene el secreto de sumario tras hallar indicios de la supuesta apropiación de fondos europeos. Los responsables de la entidad, que el miércoles cerró de forma definitiva sus puertas, mantienen que todo es un problema administrativo. Sin embargo, los responsables de la investigación consideran que sí que existen indicios sólidos de la apropiación de las ayudas.
La causa está abierta por estafa y fraude en subvenciones. El titular del juzgado de Instrucción número dos de Paterna mantiene imputadas a diecisiete personas, entre ellos al exdirector de Aido Emilio Pérez; al presidente, Rafael Ros; al subdirector; a dos consejeros; al anterior presidente; y a la mayoría de los jefes de línea, según lamentó hace dos días el propio Rafael Ros que insiste en que no se cometió ninguna irregularidad.
La Conselleria de Economía está colaborando actívamente en la investigación y se ha negado a reunirse con los responsables de Aido. Desde 2005, Aido recibió fondos públicos por valor de 28 millones. Parte de la investigación está centrada en qué pasó con las subvenciones del plan Innoempresa, un programa de ayudas para autónomos y pymes nacional y cofinanciado por la Unión Europea. El instituto tecnológico Aido tuvo acceso a estas ayudas por ser una entidad semiprivada y, sobre todo, por las empresas que están asociadas al instituto, que ejercía la labor de solicitar las subvenciones y luego distribuirlas entre sus asociados.
