Torrent se convirtió el domingo en la capital del mundo fallero con motivo de la celebración de la Cumbre Fallera del G6, órgano que congrega a las principal juntas locales falleras de la Comunitat Valenciana. En el encuentro se dieron cita las juntas y federaciones de fallas de Alzira, Borriana, Gandia, Sagunt, Dénia, Xàtiva, Junta Central Fallera de Valencia, Junta de Fiestas de Castelló y representantes de Segorbe.

La jornada comenzó con a los pies de la Torre, donde todos los participantes degustaron un desayuno típico torrentino para coger fuerzas y ponerse en marcha para conocer de primera mano el patrimonio histórico, cultural y arquitectónico de la ciudad.

En primer lugar la comitiva visitó la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, para regresar hasta la Plaza Mayor. Dentro de las instalaciones del Antiguo Mercado donde, el alcalde Jesús Ros dio la bienvenida a todos los participantes del encuentro, destacando el «carácter acogedor» de la sociedad torrentina y el «sabor a pueblo que todavía se puede percibir» en una ciudad grande como Torrent.

Visita a la Torre y el Museu

Con el regidor del área de Cultura de Torrent Alfred Costa ejerciendo de anfitrión y secundado por el concejal de fiestas de Valencia y presidente de la Junta Central Fallera, Pere Fuset, los congregados en hicieron un recorrido por el interior de la Torre, emblema del municipio, y por el Museo Comarcal donde se preparó un taller y una demostración sobre la elaboración del típico chocolate torrentino.

La explicación de las visitas a los monumentos de la ciudad estuvo dirigida por el Adrià Besó, profesor del departamento de Historia del Arte de la Universitat de València.

Pasacalle y mascletà

Después de realizar un pasacalle por varios puntos de la ciudad, y disfrutar de una mascletà que impregnó de olor a pólvora las calles de la capital de l'Horta Sud, una comida de hermandad entre todos los asistentes supuso el punto final en la Cumbre Fallera del G6.