Se agotó el tiempo del mercado de fichajes y el Levante UD no anunció la incorporación de un defensa central, una demarcación sobre la que se ha trabajado para reforzar la plantilla en estos últimos días pero que finalmente se ha quedado sin fichaje.

De esta manera, López Muñiz tendrá que terminar la temporada con los cuatro centrales que iniciaron el curso, esto es: Postigo, Chema, Cabaco y Róber.

Tras la derrota del Levante UD en Orriols ante el Celta, el domingo 14 de enero, la dirección deportiva del club mantuvo una reunión con el presidente, Quico Catalán, y el entrenador de la plantilla para definir el plan de actuación en las siguientes semanas.

En ese encuentro se determinó que la prioridad era firmar dos delanteros, tal como se ha hecho, un central y, si existía la posibilidad, un jugador de banda, que finalmente ha sido Rochina. Además, se decidió comunicar a Nano Mesa y Samu García que no iban a tener minutos y que era preferible que buscasen una salida.

A todo ello se ha suma la llegada de Iván Villar, portero cedido por el Celta, como consecuencia de la decisión de Raúl Fernández de operarse de la cadera. El regreso de Koke del Alcoyano, el fichaje de Fahad por el convenio de la Liga con Arabia Saudí y la cesión de Coke desde el Schalke 04.