Los pescadores furtivos siguen haciendo de la suyas en el litoral de Xàbia. Agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil sorprendieron en la madrugada del martes al miércoles a dos submarinistas que habían capturado en la playa de la Barraca con fusiles unos 30 kilos de pescado entre sepias, lubinas, sargos, doradas o dentón. La Guardia Civil se hizo cargo de la denuncia administrativa contra estos dos supuestos pescadores furtivos, ambos vecinos de Murcia.

Además, los agentes les intervinieron los útiles de pesca, los trajes de neopreno y todo el pescado que habían obtenido de forma clandestina, que se ha entregado, como es habitual, a una entidad benéfica, en este caso al Asilo Hermanos Cholbi de Xàbia.

Hace apenas una semana la Policía Local y la Guardia Civil acordaron vigilar el litoral de forma conjunta para frenar la creciente actividad de los furtivos. Hacen las inmersiones de noche y, supuestamente, luego venden las capturas a restaurantes. La pesca furtiva se ha convertido en una actividad lucrativa que, dado que prácticamente cada semana se sorprende a buceadores haciéndose con un buen botín de pescado, va a más.

El ayuntamiento también ha promovido una campaña contra esta práctica, que esquilma la riqueza marina de Xàbia. Se han sumado los restaurantes, que están estudiando colocar adhesivos con una leyenda que deje claro que ellos no sirven productos comprados a los furtivos.