Jacques Pieraerts (Amberes, 1959) es desde principios de año presidente y consejero delegado de Toyota España, puesto al que ascendió desde la vicepresidencia de la filial japonesa en nuestro país y desde el que pretende impulsar la marca en el escenario español y mejorar su cuota de mercado. Dice que nunca ha sido tan fácil como ahora comprar un buen coche a bajo precio y se muestra contrario a las ayudas públicas.

¿Cual es su impresión sobre la situación de la economía española?

Desde Bélgica hemos visto a España crecer muy por encima de la media europea y nos mostrábamos muy impresionados. Ahora hay una corrección muy importante que a mí me parece natural, aunque sea muy fuerte y llevará seguramente varios años porque hay una situación y un contexto muy diferentes. Estoy convencido de que los españoles lo pueden hacer. Si hay una total transparencia sobre la situación, si hay comunicación, si hay liderazgo, y un plan real a tres, cuatro o cinco año, que debe incluir muchos esfuerzos, habrá salida.

¿Considera que se están haciendo las reformas necesarias para dar confianza, garantizar la financiación de nuestra economía y emprender la senda del crecimiento?

Por ahora sólo hemos empezado y creo que hay todavía mucho por hacer, seguir en esta senda pero profundizando aún más porque de lo contrario tardaremos mucho en tener financiación.

Hay quien dice sin embargo que esta receta de recortes y rigor presupuestario, sin más, estrangula cualquier posibilidad de crecimiento a corto y medio plazo, que es una medicina que antes de curar al enfermo acabará matándolo, ¿no lo cree así?

Este es el debate que hay en toda Europa y previamente lo hubo en Estados Unidos. Es cierto que hay que mantener un equilibro, pero el problema es que tenemos que encontrar dinero para pagar, para poder financiarnos y este dinero por ahora nadie está dispuesto a prestarlo a un tipo de interés bajo. En Bélgica pasamos por un periodo muy complicado hace 30 años y en un momento dado el pago de los intereses de la deuda se llevaba el 30 por ciento del presupuesto. Con mucho sacrificio y con un rigor presupuestario por parte de todos conseguimos salir de ahí y empezar la senda del crecimiento. Creo que esa es la única fórmula.

¿En este contexto, cuál es la situación del sector automovilístico y que expectativas tienen para el más próximo futuro?

El primer semestre de 2012 se ha traducido en una caída del mercado de ventas a particulares aunque limitada porque las ofertas que hemos presentado en este segmento del mercado, de financiación a muy bajo interés, nos ha ayudado a mantener las ventas. En flotas hay que tener en cuenta que muchas marcas hacían 'kilómetros ceros' y automatriculaciones, una práctica que este año se ha moderado. De cara al futuro, Toyota ha optado por no hacer más previsiones porque en el contexto actual es muy difícil establecer un escenario marco concreto. Lo que estamos haciendo por tanto es trabajar con posibles escenarios y marcar pautas para todo tipo de casos en función de la profundidad de la caída. Trabajamos así porque es muy importante trabajar sobre escenarios, no sobre previsiones, y estar listos para reaccionar en cada caso.

¿Esta caída de las ventas en el sector es proporcional a la profundidad de la crisis, o está siendo especialmente castigado?

Creo que todos los sectores están siendo castigados de forma importante. Se habla más del sector de la automoción porque tiene mucha visibilidad, pero puede ser parecida a la que están sufriendo todos los sectores en la industria y en el comercio.

Usted se ha declarado contrario a las ayudas públicas al sector, ¿por qué?

Porque está demostrado que las ayudas públicas no hacen los coches más baratos, sólo adelanta la demanda y crea picos y caídas de ventas difíciles de gestionar. Nosotros desde Toyota queremos decir muy claramente al consumidor que nunca ha sido tan interesante, incluida la última ayuda pública, el Plan 2000E, comprar un coche. Las promociones que existen ahora en el mercado español hacen que los coches sean baratísimos. Las empresas que tenemos financieras propia ofrecemos financiaciones a particulares, autónomos y a pymes y a un tipo de interés muy bajo. Hay que dejar de decir que necesitamos ayudas porque el mensaje que estamos mandando al cliente es que las necesitamos para que comprar un coche sea interesante y no es así. Es falso. No hace falta. Ahora estamos haciendo ofertas que dejan el precio mucho mejor que en los tiempos de las ayudas públicas.

¿Le preocupa el impacto que pueda tener la subida del IVA ?

Esta claro que eso va a encarecer el precio del coche y como además las familias españolas están sufriendo una reducción del poder adquisitivo por todas las medidas que se han tomado durante la crisis, va a complicar las ventas a los particulares. Con todo, si compras un coche que te va a durar seis, siete, ochos años, al final el impacto real no es significante. Es el impacto psicológico de la subida lo que puede hacer más mella en el consumidor.

¿Cual es la evolución de Toyota en el mercado español, tienen expectativas de mejorar su cuota de mercado?

Claro que nuestro objetivo es mejorar nuestra cuota de mercado neto actual, de cerca del 5 por ciento, pero mi filosofía es de hacerlo de forma progresiva y continuada. En el marcado total estamos creciendo un 0,5 por ciento, que por mi experiencia es muchísimo. Lo que no queremos es hacer locuras que luego haga complicado mantener esa cuota y esas subidas.

¿Qué modelos funcionan mejor, cuáles están notando más la crisis?

En todas las crisis y en todos los países, el peso relativo de las marcas premium se mantiene mejor, la gente que tiene dinero no sufre tanto las crisis. En Toyota hemos definido tres pilares: los modelos núcleos, los producidos en Europa, que son Yaris, Auris, Verso y Avensis. El segundo pilar son los coches híbridos y el tercer pilar son los 4 por 4. El nuevo Yaris va muy bien porque por fin tenemos un coche que es más grande que en España corresponde a lo que espera un cliente como primer coche de la familia, el anterior modelo del Yaris al ser más pequeño era el segundo o tercer coche. Auris sigue siendo el modelo más importante para nosotros, y Avensis, con la remodelación que hicimos en enero va muy bien. Todos los híbridos van muy bien y casi hay una atracción casi natural por los híbridos en España y por ejemplo el Prius es aquí donde más se vende de toda Europa tras Inglaterra, que tiene un mercado el doble o el triple que el nuestro. El motor eléctrico es más sencillo de lo que la gente piensa, no hay embrague y las pastillas de freno pueden superar los 80.000 kilómetros. Sufrimos un poco en Verso, y en 4 por 4 estamos recuperando posiciones en RAV4, pero hay más problemas con Hilux (tipo furgón) porque tenemos una cuota alta, la aumentamos, pero el segmento ha bajado un 50 por ciento.

Un modelo, un perfil

¿Hay un perfil de cliente Toyota?

Tenemos una gama muy amplia y por tanto un perfil casa para cada uno de nuestros modelos. Pero sí sabemos que el cliente Toyota está por encima de la media en edad, formación profesional e ingresos económicos. Es una de las razones por la que la crisis nos está afectando algo menos que a otras marcas.