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Patriota de granito

Cuando el nuevo president de Catalunya Carles Puigdemont fue ungido, un tipo que no recuerdo destacó entre las cualidades del personaje, que las tiene, que «és un patriota de pedra picada (de granito)» ¿Se imaginan un elogio de tal naturaleza, dedicado a un ministro del PSOE o, incluso, del PP, que tuviera algún recorrido? Claro que no. Pertenece al acervo de las aportaciones de la izquierda abertzale -aparte de su línea catastrófica de peluquería - la expresión ´fascismo español que, bien escupida, induce a la identidad entre los dos términos de la expresión. No, queridos: vascos eran varios de los padres del fascismo castizo.

El patriotismo sería precioso si sólo hubiera una patria, pero como hay varias y además en concurrencia (y, a veces, muchas dentro de una misma, como un yo poseído por la polifonía o el don de lenguas), lo correcto es llevar el patriotismo como las erecciones o las inflamaciones contagiosas: con cierto recato y que ustedes lo disfruten en íntima armonía. Sin embargo sigo viendo la política catalana metida en un curso autohipnótico (Sloterdijk) en el cual el concepto independencia suena y resuena como un mantra cada vez más alejado de procesos intelectivos, lo que explica, de paso, la furia con que se reacciona cuando alguno ´de los nuestros´ eleva un reparo. Independencia, como Revolución, son ideas turbión que absorben en remolino toda la materia próxima, de ahí la alegría con que se habla de violar normas o ´desconectarse´ de ellas.

Por mucho que busquemos no hay, desde la Guerra de la Independencia, un periodo más fructífero que los últimos cuarenta años. En todos los sentidos, también para Cataluña. El resto de los dos siglos es un frustrante desasosiego con breves excepciones. Cierto que nos han ayudado circunstancias ajenas como un largo periodo de expansión económica en Europa, pero por eso mismo, porque ni el interior ni el entorno son manifiestamente adversos, no veo la urgencia soberanista. Por más que el gobierno Rajoy esté atado por los lazos viscosos de las mafias de cuñados y favorecidos y la mierda les llegue hasta la nuez.

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