Queda algún departamento en la Administración pública en el que no se haya producido una actuación delictiva „o presuntamente delictiva„? La cascada de sumarios en manos de los jueces, muchos de ellos previsibles después de haber tenido conocimiento y denunciado „especialmente este periódico„ determinadas conductas muy poco éticas, es abrumadora y se incrementará en los próximos meses.
La más reciente, la de la empresa estatal Acuamed, tiene visos de no haber hecho más que empezar y apunta hacia «piezas» más altas.
Las investigaciones también continúan en la causa en la que está involucrada Consuelo Ciscar, recién imputada, y la «cúpula» del IVAM. Tal vez estemos hablando en ambos casos de las puntas de sendos icebergs. Porque hay otros asuntos, como los de Ciegsa o el cártel para el amaño de concursos de servicios aéreos antiincendios, sanitarios,.. „por cierto, Competencia sigue sin dar señales de vida„ que aparentemente pueden ofrecer ya pocas sorpresas.
Y la que se nos viene encima.
Ahora que Adam Mckay nos retrotrae con su película «La Gran Apuesta» „que se estrena precisamente hoy„ a la crisis financiera que sufrimos y de la que no conseguinos levantar cabeza, hay que recordar la avalancha de juicios pendientes relacionados con aquellos momentos: Bankia, Banco de Valencia o la CAM en sus diferentes ramificaciones. Causas al borde de la apertura de juicio que provocarán un incesante desfile de personajes ilustres por los juzgados.
Un desfile que ya ha comenzado con la tanda de comparecencias en la nueva „y espero que definitiva„ comisión de investigación del accidente „43 muertos, no olvidar„ del metro. Algo ya se reconoce „Dómine„ con lo de la baliza, aunque sea diez años después. Aunque hay personas que no cambian „Marisa Gracia„ y continúan sin ceder ni un resquicio a la responsabilidad política.
Apabullante.
Aunque menos mal que hay algunas cosas que ponen en valor la capacidad de las personas para destacar en el aspecto humano, como el activista gitano Vicente Rodríguez y la artista Irene Grau, dos valencianos por méritos propios en la lista Forbes de los jóvenes más influyentes. El futuro.
