José Luis López reparte folletos divulgativos en inglés a todos los jóvenes extranjeros que se han acercado esa tarde de jueves a Pelayo. Su presencia ha dado vida y juventud a las gradas. «Cuesta animar los jueves€», se lamenta el nuevo propietario del trinquet, a quien se le ve feliz e ilusionado con su nuevo proyecto. Tanto que uno empieza a dudar si realmente habrá traspaso a una propiedad pública por mucho que las administraciones se esmeren en preparar convenios.
Adquirir un patrimonio cultural valenciano no tiene precio€Y menos para quien no necesita los euros para pagar hipotecas o dejar ricos a los hijos. En su despacho programa con Fredi las próximas actividades de promoción. Hay mucha ilusión con la gran respuesta de los centros educativos de la geografía valenciana a su oferta de puertas abiertas y jornada divulgativa. El día 22 de marzo tienen comprometido el trinquete para cuatro centros escolares: dos de Valencia, uno de Cullera y otro de Meliana. Conocerán las instalaciones y tendrán oportunidad de practicar este deporte dirigidos por expertos monitores. Hay más de cuarenta solicitudes llegadas en menos de una semana. Algunas cadenas hoteleras ya ofrecen Pelayo entre sus ofertas de visitas turísticas. Quizás por ello se intenta recuperar la semana fallera con los mejores carteles.
Un trabajo bien estructurado ha convertido a Pelayo en lo que siempre fue: la referencia indiscutible de la pilota valenciana. Hasta el nuevo equipo de Llargues de la capital valenciana ha salido de sus entrañas y lucirá el nombre del trinquete. Se han empeñado en jugar la Champions con los mejores clubes europeos y van a pelear por conseguirlo. Pelayo sonará allá donde haya Joc de Pilota. El recinto deportivo en uso más antiguo de Europa, pues el esferisterio de Alba se ha cerrado a la práctica deportiva, merece ese privilegio.
