El pequeño, o al menos joven, Francisco Nicolás entra y sale de Gran Hermano VIP con tanta soltura e intermitencia como lo hace de los juzgados. Lo expulsaron de la casa el primero, pero lo repescan como concursante al mismo tiempo que los tribunales lo vuelven a reclamar. ¿Creen ustedes en las casualidades? Yo diría que Telecinco tampoco. Hay que amortizar los elevados honorarios del conseguidor que jugó a ser James Bond, político y empresario al mismo tiempo.
La semana pasada La Sexta dedicó su Equipo de investigación al personaje judicial y televisivo. Con su entonación tantas veces inquietante, la voz de Gloria Serra fue reconstruyendo la trayectoria de Fran según la documentación que se acumula en los tribunales. Y no es ninguna broma de lo que se le acusa, sino una suma de delitos serios que pueden llevarlo a la cárcel. Mientras tanto, el investigado se dedica en cuerpo y alma a aislarse en la casa de los presuntos famosos y a aumentar su cuenta corriente a cuenta de la tele. Tal vez tenga la misma manifiesta seguridad en sí mismo que en su abogado. Más le vale estar en lo cierto si no quiere acabar como un condenado VIP, que también los hay.
La picaresca es un género muy español y el modelo literario ha pasado a la televisión. Si gustó El Dioni también puede aprovechar su fama el niño que consiguió escolta, chófer y acceso a los poderosos.
La justicia dirá hasta dónde es una estafa el personaje, pero de momento el Telediario no es una pena para él sino la palanca para cotizar en la plantilla de famosos de Mediaset y hacer caja. El paseíllo judicial le va mucho mejor que a Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarín. En el banquillo de los acusados nadie parece un VIP.
