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La vida impasible

Sonia: «Me molesta la gente que come palomitas en el cine a pu-ados y con la boca abierta y escarba entre los cubitos de hielo en busca de la -ltima burbuja de refresco aguado. No soporto a los comedores compulsivos de pipas que se pasan horas chupando, mordiendo y escupiendo para dejar el suelo a sus pies lleno de cáscaras vacías. No me gustan los tipos que llevan las ventanillas del coche bajadas aunque sea pleno invierno y con la m-sica, habitualmente horrenda, a todo volumen, no para escucharla mejor sino para que les escuchen pasar y les miren. Me ofenden los fitipaldis de vía estrecha que hacen gritar sus neumáticos arrancando entre olor a goma quemada para llamar la atención y sentirse especiales. Coleccionan complejos, sin duda. Me dan grima los que no se conforman con un tatuaje anecdótico de recuerdo o un mensaje al mundo y convierten su cuerpo en frondosos lienzos de dibujos casi siempre horteras. Me irrita la gente que en el supermercado llena sus bolsas con calma infinita y, aunque haya cola esperando, no tienen reparto en coger la factura y, sin apartarse, cotejan lo escrito con lo que llevan.

Por no hablar de quienes se ponen a hablar del tiempo o de los problemas de su espalda con la cajera. Me cansan los que se pasan el día quejándose de todo y de todos, aunque nunca les oirás una autocrítica. Me fastidian los que se quejan de lo mucho que trabajan aunque no dan palo al agua, los que critican a los políticos por lo que ellos mismos hacen en su vida cotidiana, los que opinan como torquemadas de vida estrecha de libros que no han leído o películas que no han visto, los que te miran de arriba abajo cuando entras en un local, los que te dicen confía en mí cuando su especialidad es traicionar a quienes cometen la ingenuidad de creerles, los que hablan por el móvil a gritos y los que se cuelan en los ascensores de los centros comerciales sin esperar la cola. Y me caigo muy mal yo, porque soy incapaz de decir lo que pienso y voy llenándome de resignaciones que me hace la vida impasible».

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