La mayor operación contra el narcotráfico en el puerto de Castelló de las últimas décadas, desarrollada el lunes, ha conmocionado a los vecinos del distrito marítimo. «No veíamos nada parecido desde hace 20 años», resaltaron ayer varios pescadores. Y la investigación aún no ha finalizado. Por ahora se ha saldado con 2.500 kilos de hachís requisados en un barco pesquero del Grau (El Bergantí), y con 12 detenidos, nueve vecinos del Grau más otras dos personas en Denia (de nacionalidad polaca) y una última en Valencia.
La operación, bautizada Vento, sigue abierta, la juez instructora del caso (titular del número 4 de Castelló) ha declarado el secreto de sumario, y no se descartan nuevos arrestos, según señalaron fuentes de la investigación a este diario. Una veintena de agentes de la unidad de Delincuencia Organizada Antidroga de la Guardia Civil (EDOA) registraron el barco de nuevo a las dos y media de la tarde, acompañados por la juez instructora del caso, quien ordenó la descarga de la mercancía para su posterior análisis. Las doce personas implicadas en el alijo pasaron por su parte por la tarde a disposición judicial.
La investigación se inició meses atrás y culminó en la tarde del lunes con una acción a gran escala que se desarrolló de forma conjunta en Castelló, Valencia y Denia, y en la que participaron un helicóptero, dos lanchas rápidas y diez vehículos de la unidad de Delincuencia Organizada Antidroga y las comandancias de Valencia, Castelló, Tarragona y Baleares, tal como publicó Levante de Castelló. La Guardia Civil apresó en Castelló la embarcación de arrastre, detuvo a nueve vecinos del Grau, entre otros los ocho tripulantes de la misma(cinco marineros, el patrón, un mecánico y un estibador), e incautó 2.500 kilos de hachís (70 fardos distribuidos en bolsas de 30 kilos). En Valencia fue arrestada otra persona, mientras en alta mar fue interceptado un velero procedente de Denia, con dos ocupantes en su interior, en el que al parecer se realizó el traspaso de la droga al pesquero castellonense para que este último lo llevara a la costa, según apuntaron fuentes conocedoras del caso. Una práctica predominante en las costas gallegas y que se ha trasladado a la Comunitat Valenciana.
El Bergantí salió a faenar como todo los días de buena mañana y regresó a las cuatro de la tarde a la lonja de Castelló, momento en el que fue apresado por las fuerzas de la Guardia Civil. Todo hace indicar que el alijo encontrado en su interior no era el primero que transportaba el Bergantí hacia Castelló. A este respecto, la Guardia Civil investiga si hubo otra descarga de droga en el canal del varadero viejo del puerto pesquero en el último mes.
«Se fue más hacia dentro de lo habitual y un avión de vigilancia lo avistó», añadieron varios testimonios, quienes apuntaron que el Sistema de Vigilancia Aduanera ha sido clave a la hora de desarticular esta red de narcotráfico. Algún marinero no descartaba la posibilidad de que algún resentido al que no dejaron participar en este negocio ilegal se chivara a la policía.
La embarcación continuó todo el día de ayer retenida en uno de los muelles del puerto pesquero y de momento se desconoce su futuro. El amplio despliegue policial de lunes pilló por sorpresa al resto de marineros de la lonja. Agentes especiales antidroga y guardias civiles de cuatro provincias intervinieron en el mismo.
