La Obra Social de La Caixa de Sollana acaba de realizar una donación de 1.000 euros a la delegación de Cáritas del municipio. La entrega se destinará a la compra de alimentos para las familias necesitadas. Ahora que alrededor de 400 vecinos de Sollana se han quedado sin empleo tras el cierre del almacén hortofrutícola de Frutsol, esta acción será todo un alivio para muchas familias que han visto desaparecer su principal fuente de ingresos. p. b. sollana