La indignación era el denominador común de un reducido grupo de vecinos que se concentraron en la tarde del martes ante las dependencias de la Policía Local mientras la alcaldesa, Raquel Tamarit, y el concejal de Seguridad Ciudadana, Salvador Giménez, se reunían con los agentes. Los afectados habían respondido a una convocatoria que horas antes circulaba vía WhatsApp. Expresiones «escándalo» o «abuso de autoridad» estaba en boca de casi todos. Tal como adelantó este periódico el sábado, en sólo doce días se impusieron 958 sanciones, frente a las 1.506 de todo el año pasado.
«Cobro 500 euros y me han multado con 200 por estacionar mi vehículo pisando ligeramente un paso de cebra», manifestaba con impotencia uno de los reunidos. Otro narraba el caso de un comerciante que estacionó sobre la acera para realizar carga y descarga, «y el policía aparcó también sobre la acera y bajó para denunciarlo». Algunos de los afectados lamentaban que han sido denunciados por estacionar como lo venían haciendo «toda la vida».
Dejar el vehículo unos minutos en el propio vado, estacionar con dos ruedas sobre la acera para permitir el paso en calles estrechas u ocupar unos centímetros de un paso de cebra puede costar al conductor entre 40 y 200 euros.
