La última reunión del Consell de Turismo de Cullera sirvió para solicitar al equipo de gobierno que cese las concesiones para ejercer actividades comerciales y venta ambulante en el paseo marítimo en los meses de julio y agosto.

Este órgano consultivo formado por comerciantes, hosteleros, administradores de fincas y promotores inmobiliarios, además de representantes de los grupos políticos, planteó en la reunión del jueves, y a petición de los miembros de Acecu, la necesidad de pedir al ayuntamiento que durante los meses de julio y agosto no conceda licencias de carácter comercial de venta ambulante en el paseo.

Los comerciantes consideran que ésta sería una medida muy importante para que los visitantes se adentren en la ciudad y conozcan más y mejor la oferta comercial que hay en Cullera. Por otra parte, Acecu considera que en la zona turística de la playa hay muchos bajos comerciales que permanecen cerrados, especialmente en la zona ZAS que incluye las calles Barcelona, Madrid y Algemesí, que podrían servir para aquellos que quieren aprovechar el verano, pero al mismo nivel que los empresarios que si están al corriente de impuestos y generan empleo.

La Asociación de Hostelería señaló que «es una medida que sería muy adecuada» ya que la gente «podría encontrar la tranquilidad necesaria para poder cenar junto al mar sin molestias ajenas». Juan Femenía propuso que estos mercadillos se reubiquen en otras zonas para dinamizarlas.

Por su parte, el concejal Hugo Font se manifestó en contra de la venta ambulante que hace competencia a los comercios, aunque se manifestó a favor de regular la venta de productos artesanales, culturales y artísticos con el matiz de intentar desmasificar la zona central del paseo marítimo e intentar ubicar la misma en zonas más diferenciadas como El Racó para favorecer que la gente se desplace a otros lugares de la playa. La propuesta de Acecu fue aprobada por unanimidad.