El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha tomado una clara ventaja respecto a su competidor, Rafa García, entre los militantes socialistas de la Ribera Alta que han de participar en el proceso de primarias montado para elegir al próximo secretario general del PSPV. Los partidarios de Puig dominan la inmensa mayoría de las agrupaciones locales de la comarca y hasta algunos de los más conspicuos defensores de Pedro Sánchez, como el carcaixentino David Pedrón, defienden con fervor su continuidad al frente de la federación valenciana.
Decenas de afiliados socialistas se reunieron anoche en Villanueva de Castellón en uno de los primeros actos públicos de apoyo a Ximo Puig organizados en la comarca. El principal orador era el presidente de la diputación, Jorge Rodríguez, pero junto a él también intervino Pedrón, uno de los más reconocidos sanchistas de la Ribera Alta. Fue el hombre que organizó la primera plataforma de apoyo al defenestrado secretario general y el que se batió el cobre para recoger avales y buscar financiacion, incluso con la venta de participaciones de lotería que reproducían la fecha del traumático comité federal en el que se forzó la dimisión de Sánchez.
Una vez conseguida su restitución como líder del PSOE, Pedrón ha decidido ahora entregarse a Puig con la misma pasión que trabajó para Pedro Sánchez. Su agrupación, la de Carcaixent, le brindó un aplastante victoria en la primarias y todo indica que ahora apuesta con idéntica entrega para garantizarle el control de la ejecutiva socialista valenciana a Puig.
Pequeños focos de resistencia
El principal foco de resistencia lo forman en Alzira Fernando Pascual e Isabel Aguilar. El primero, secretario de organización de la ejecutiva provincial del partido es un fiel aliado del actual número tres del PSOE, José Luis Ábalos, y la segunda fue nombrada en el reciente congreso de Madrid miembro del comité federal. Es la primera militante de la Ribera que consigue abrirse un hueco en el máximo órgano de dirección de los socialistas. Ambos prefieren al alcalde de Burjassot, el hombre elegido por los sanchistas para enfrentarse y desgastar a Puig. El alcalde de Montserrat, José María Mas, tampoco se ha decantado hasta ahora en favor del presidente de la Generalitat, al igual que el grueso de las agrupaciones de Montroi y Real.
Frente a esa opción, otros líderes del partido ya han dado un paso al frente en favor de Puig. Entre los más entusiastas se encuentra la alcaldesa de Algemesí, Marta Trenzano, que llegó a titubear con los sanchistas e incluso figuraba en una de las primeras filas en el congreso que repuso a Sánchez como secretario general.
También han brindado su respaldo a Ximo Puig la alcaldesa de Benifaió, Marta Ortiz, la de la Pobla Llarga (Neus Garrigues) y las de Beneixida (Eva Roig) y Sant Joanet (Paqui Momparler). En el mismo frente figuran el presidente de la Mancomunitat de la Ribera Alta y alcalde de Sumacàrcer, Txema Pelárez, y el alcalde de Alcàntera de Xúquer, Julio García.
