Ya ni el Gobierno local de Gandia, del PP, esconde su malestar con la consellera de Educación, María José Català, del mismo partido, por su ocurrencia de adelantar el curso escolar al 3 de septiembre. Ya lo publicó el pasado domingo Levante-EMV y ahora ha sido el propio ayuntamiento quien ha podido constatar que el adelanto de las clases ha cortado abruptamente la que estaba siendo una buena campaña para el sector turístico tras unos meses de julio y agosto de buenos números.
«Se ha notado un descenso en la playa de Gandia respecto a otros meses de septiembre, sin duda», dijo ayer Víctor Soler al ser preguntado por la cuestión durante la rueda de prensa en la que explicaba los acuerdos de la Junta de Gobierno.
El portavoz del ejecutivo, en todo caso, se mostró prudente a la hora de ofrecer cifras y afirmó que «vamos a dejar pasar unos días, a valorar y estudiar el impacto de este adelanto del curso escolar para hacer llegar las conclusiones a la Generalitat».
Así pues, el consistorio gandiense pretende elevar a la propia consellera su postura contraria a una decisión que, a su entender, ha perjudicado notablemente a uno de los principales motores económicos de la ciudad. Lo ideal es que los datos sirvan para no caer en el mismo error el próximo año.
Quien sí que se mojó y ofreció una primera valoración en números fue Emilio Rees, presidente de la Asociación de Empresarios de la Hostelería y el Turismo de la Safor (Asemhtsa), quien cifró en cerca del 25 % el impacto negativo que el adelanto de las clases en infantil, primaria y secundaria ha tenido para el tejido empresarial durante la primera semana de septiembre, donde, al menos en Gandia, aún se considera campaña alta de verano
En todo caso, la postura de Víctor Soler no desentona con la que ya mostró el alcalde, Arturo Torró, quien dijo que «la decisión de la conselleria no ha sido buena y creo que se debería replantear de cara al próximo curso. Torró, de hecho, propuso atrasar el comienzo al 15 de septiembre «y solo por las mañanas», dijo.
Cambio en el perfil de cliente
Bien distinto es el análisis del sector hotelero de la playa de Gandia. El presidente de la asociación, Pablo del Castillo, apuntaba ayer a este periódico que «no hemos notado mucha diferencia respecto a la primera semana de septiembre de años anteriores».
Lo que sí que ha cambiado, reconocía del Castillo, es el tipo de turistas que estos días se alojan en la ciudad. «Hay menos niños, es un perfil de personas sin hijos pequeños pero por lo que respecta a la ocupación se mantiene en los niveles normales».
Precisamente en los datos que publicaba este periódico el pasado domingo, Emilio Rees reconocía lo mismo y apuntaba que «es un tipo de turista que no consume tanto como el que habitualmente viene a la playa de Gandia».
Volviendo a los hoteles, del Castillo recordaba que «el adelanto en el inicio del curso solo ha tenido lugar en la Comunitat Valenciana, por lo que para nosotros no ha sido especialmente significativa la medida».
Por otra parte, el presidente de la asociación de hoteleros adelantó que en unos días, cuando se recopile toda la información necesaria, se darán a conocer los resultados del mes de agosto. Aunque no quiso adelantar datos, dijo que «ha sido bueno» y apuntó que «es posible que en rentabilidad haya sido mejor que otros años».
