Cáritas Interparroquial de Oliva ha denunciado, a través de un comunicado, el «deficiente» funcionamiento que, a su entender, tiene el departamento de Bienestar Social dirigido por el concejal de EUPV Àlex Salort.

Por una parte, critican que el ayuntamiento haya dejado una partida de 11.000 euros sin gastar del presupuesto destinados a familias desprotegidas de la ciudad «pese a que la necesidad en vez de reducirse no deja de aumentar cada año», señalaban desde la entidad solidaria en el escrito remitido ayer.

Por otra parte, denunciaron lo que tacharon de «clamor» de los usuarios, el hecho de que el departamento esté dando citas de hasta cuatro meses para atender a personas que piden ayudas de emergencia. «Se trata de gestiones que no dependen de la disponibilidad económica y que, en ocasiones, supone emitir un escrito o informe que se demora injustificadamente», apuntaron desde Cáritas.

En respuesta a este escrito, el edil Àlex Salort reconoció que el asunto de los retrasos «es grave» y que, aunque «no es nuevo, sí que es cierto que nunca había llegado a los cuatro meses». En todo caso, indicó el responsable de Bienestar Social, «a partir de la semana que viene se va a solucionar». El edil ha reestructurado el área para poder otorgar hasta 17 turnos más cada semana y, de ese modo, descongestionar la lista de espera. «La idea es, poco a poco, ir aumentando más el número de citas».

Estas visitas son, principalmente, para que el trabajador social evalúe a la persona que reclama la ayuda para conocer su situación real.

Salort apunta que la causa principal del problema de la lista de espera es la falta de personal, un asunto que espera también poder solucionar próximamente. «Necesitamos trabajadores sociales y auxiliares para reforzar el departamento».

Respecto a los 11.000 euros sobrantes, el concejal explicó que en el presupuesto había 100.000 pero que él consiguió otros 15.000 de la Diputación de Valencia. Del total, se gastaron 89.000 y el resto no se pagó porque se denegaron 131 solicitudes porque los usuarios no tenían toda la documentación en regla.