Como adelantó Levante-EMV el pasado viernes, Rosana Seguí Sanmateu se convirtió ayer en la nueva alcaldesa de Guardamar de la Safor, en sustitución de Josep Martínez Moncho, quien, tras 17 años al frente de este pequeño municipio, la semana pasada presentó su dimisión por sorpresa y renunció al acta de concejal.
Seguí, cuarta en la candidatura independiente Gent de Guardamar, fue la única aspirante a sustituir a Martínez, algo lógico si se tiene en cuenta que esta agrupación política tiene cinco de los siete concejales de la corporación. Al pleno no asistió el representante del PP, José Barber.
La nueva alcaldesa, que es militante del Bloc, recibió los cuatro votos de su grupo, a la espera de que se incorpore Juan Cristóbal Aparisi, el concejal que sustituirá al dimitido Martínez. Por su parte el representante de la Unió de Ciutadans Independents, Carlos Company, optó por la abstención.
Después de jurar el cargo, Rosana Seguí quiso, en primer lugar, agradecer el respaldo de sus compañeros de Gent de Guardamar, y después ensalzó la labor del exalcalde Josep Martínez, que no acudió al pleno extraordinario porque no se encuentra en el municipio. Dicho eso, la alcaldesa dijo que «vamos a continuar la línea que Pep Martínez marcó en 17 años de alcaldía», pero también transmitió la idea de pasar página y apeló «abrir una nueva etapa» política en el municipio.
Según el concejal Carlos Company, el único de la oposición ayer acudió al pleno, esa nueva etapa parece que ya se ha iniciado porque Seguí ya ha mostrado un talante diferente, de más respeto y consideración hacia los representantes políticos que no son de Gent de Guardamar.
Al margen del relevo en la alcaldía, el acto de ayer tiene un segundo significado político, por cuanto se abre el paso a que la candidatura Gent de Guardamar sea reconocida como propia por el Bloc y por Compromís.
Todo arranca en la convocatoria de las elecciones municipales de 2015, cuando Compromís impidió a Josep Martínez que formara parte de la lista, pese a haber sido 16 años alcalde con mayoría absoluta, debido a que estaba implicado en una causa judicial, hoy definitivamente archivada, acusado de prevaricación y estafa.
«Independientes del Bloc»
Martínez y el resto de militantes y simpatizantes del Bloc y de Compromís optaron entonces por constituir Gent de Guardamar, candidatura que revalidó la mayoría absoluta. Nadie duda de que esta agrupación política comparte ideología con Compromís, pero hasta ahora han tenido que figurar como «independientes».
Ferran Seguí, secretario de Compromís en Guardamar, indicó a este periódico que esta agrupación ya ha solicitado la integración en el Bloc, partido al que pertenece la mayoría de la lista, entre ellos la nueva alcaldesa.
Ahora todo queda en manos del Consell Nacional del Bloc, que determinará si da su visto bueno al «retorno» de Gent de Guardamar al seno del partido, después de que, definitivamente, la justicia ha eximido a Josep Martínez de todas las causas penales que tenía pendientes a raíz de la denuncia de una vecina por la reparcelación del polígono industrial.
Mientras el Bloc decida, los dirigentes de este partido y de la coalición Compromís de la Safor han querido mantener las distancias. Así, al acto de investidura de la nueva alcaldesa de Guardamar no acudió ningún dirigente comarcal ni del Bloc ni de Compromís.
