Nahuel González, concejal de Més Gandia y coordinador local de Esquerra Unida, señaló ayer que dos fueron las exigencias que puso para poder aprobar este acuerdo con Aguas de Valencia.
Por una parte, que el incremento anual de la tarifa, un punto por encima del IPC, se compensara mediante la reducción en la tarifa de alcantarillado, evitando así que los ciudadanos paguen más.
Por otra, que se encargue una auditoría para determinar con todo detalle adónde fueron a parar los 55 millones de euros que, en 2008, recibió el ayuntamiento a cambio de entregar a Aguas de Valencia la gestión del agua por un periodo de 25 años.
A esa auditoría se suma también el grupo del PP. El portavoz de esta formación, Víctor Soler, señaló que respalda el encargo del informe sobre el destino del canon, que en gran parte fue a parar a obras públicas, y recordó que hace meses solicitó justamente un informe sobre esa cuestión.
Por otra parte, Soler lamentó al Gobierno local que en un tema de tanta importancia para la ciudad ni siquiera haya sido consultado el grupo mayoritario. s. s. gandia
