El arte poético de Ausiàs March y de Vicent Andrés Estellés, con versos escritos en las paredes, la arquitectura que permite recuperar espacios públicos y la historia de saberse situado sobre la antigua muralla medieval de Gandia.
Todos esos elementos se combinan en el Mirador del Serpis, que el Gobierno local quiere bautizar con el nombre de Ausiàs March, abierto ayer al público tras una inversión de 90.000 euros aportados por la Diputación de Valencia.
El proyecto, redactado por Fernando Mut, es, como su nombre indica, un balcón abierto hacia el río Serpis y el parque de Ausiàs March que ocupa el espacio comprendido entre el colegio de les Carmelites y el edificio del antiguo mercado municipal.
La alcaldesa de la ciudad, Diana Morant, representantes de todos los grupos políticos y de la empresa Construcciones Bañuls, que ha llevado a cabo la ejecución.
Morant elogió esa actuación, cuyas principales características son la utilización de la madera para cubrir la explanada y el hecho de haber preservado escrupulosamente los restos arqueológicos y la muralla situada en el subsuelo. El espacio permite contemplar desde el centro de la ciudad el parque de Ausiàs March entre el Pont Nou de la avenida de Alacant y la Pasarela del paseo de les Germanies. También hay acceso al vial peatonal y ciclista que discurre paralelo al río Serpis.
El mirador se sitúa, en parte, sobre parcelas en litigio judicial, dado que existe una sentencia, recurrida por el ayuntamiento, que obliga a devolver los solares expropiados hace más de una década a sus propietarios. Uno de ellos, José Luis Mas, recordó ayer este hecho y señaló que el conflicto se tendrá que resolver cuando se dicte la sentencia definitiva.
