Benirredrà con 72,57 euros por vivienda y Guardamar de la Safor, con 31,99, tendrán, el próximo año 2017, la tasa de la basura más elevada y más baja, respectivamente, entre los municipios de la comarca que gestiona el Consorcio de Residuos V5, (COR), que cubre la Safor (excepto Barx y la Valldigna), la Vall d'Albaida, la Costera, la Canal de Navarrés y el Valle de Ayora.
Como adelantó hace unos meses Levante-EMV, en el ejercicio del año que viene el COR ha puesto en marcha un proyecto para activar la recogida selectiva de residuos en ecoparques fijos y móviles que suponen la inversión de unos 12 millones de euros. Eso ha generado una subida generalizada de la tarifa que pagarán todos los usuarios. El incremento se sitúa entre la horquilla de los 5,45 euros para la Font d'en Carròs y los 12,96 para l'Alqueria de la Comtessa.
En cifras absolutas, Junto a Benirredrà los municipios con la tasa de basura más elevada son Almoines, Beniarjó, l'Alqueria de la Comtessa, Palma de Gandia, Palmera, el Real de Gandia, Ròtova y Villalonga, todos ellos por encima de los 60 euros por vivienda.
La tasa más baja, además de Guardamar, corresponden a Alfauir, Bellreguard, Castellonet de la Conquesta, Daimús, Llocnou de Sant Jeroni, Miramar, Potries, Piles y Xeraco, donde en ningún caso llega a los 50 euros.
Según señaló el COR tras la asamblea celebrada la tarde del miércoles pasado en Xàtiva, para el próximo año se inicia un plan de erradicación de vertederos incontrolados, dado que muchos alcaldes «han denunciado la existencia de espacios donde se lanzan los residuos de manera ilegal y que sería de gran ayuda que el COR utilizara su capacidad operativa y financiera para paliar el problema».
El presidente del COR, Roger Cerdà, señaló que «la presencia de residuos en espacios no controlados supone un serio problema» en la mayoría de los 93 municipios de las cinco comarcas en la que este organismo gestiona la eliminación de las basuras.
Como ya señaló este periódico, el COR asumirá paulatinamente los grandes ecoparques de Gandia y Oliva, así como el de Xeraco, e implantará un sistema de recogida selectiva que será móvil. Cada ayuntamiento recibirá información sobre los días, horas y lugares en que los camiones acudirán a cada uno de ellos para que los vecinos puedan deshacerse de todo tipo de residuos, incluyendo muebles viejos, electrodomésticos y materiales de derribo, que son los que llenan caminos rurales, barrancos e incluso espacios urbanos en muchos municipios.
Las personas que acudan a lanzar materiales que se puedan reciclar recibirán un «premio» que consistirá en la reducción de la tarifa que abonarán al COR en ejercicio siguiente, de 2018. A mayor cantidad de material reciclado, mayor descuento, hasta un máximo de 12 euros al año.
