La planificación educativa que ha diseñado la Conselleria de Educación para el próximo curso, el conocido como arreglo escolar, arroja un saldo positivo en la comarca de la Safor por segundo año consecutivo. Esto significa que, al contrario de lo que ocurrió en la última etapa del PP al frente del Gobierno de la Generalitat, se crean más unidades de las que se destruyen.

Eso sí, existen algunas diferencias sustanciales en lo que respecta al mapa que propuso el departamento dirigido por Vicent Marzà el pasado año y que afectaba al curso que actualmente está en marcha. La primera es que todas las aulas nuevas que se crean en infantil y primaria lo hacen en calidad de «habilitadas», esto es, su funcionamiento es provisional y no se consolidarían, en todo caso, hasta el próximo curso en función de las matriculaciones.

El segundo de los aspectos que llama la atención es que se dobla el número de supresiones respecto al curso anterior. De las tres registradas para el ejercicio 2016-2017, la propuesta provisional de la Generalitat para el curso que arrancará en septiembre suma hasta siete, lo que va en la línea de lo que ha ocurrido a nivel general en toda la Comunitat Valenciana.

Si bien, al contrario que en otras localidades, en ninungo de los centros concertados de Gandia que ofrecen bachillerato se han eliminado unidades.

En cifras concretas, la Generalitat crea, de cara al próximo curso, un total de 30 nuevas unidades. A su vez, se suprimen siete aulas. A estas hay que sumarle dos que se quedarán sin funcionamiento (NF en la nomenclatura que le otorga la Generalitat), que son el colegoi Alfàndech de Tavernes de la Valldigna y el Mestre Noguera de Daimús. Son aulas que exisiten este curso y que no se eliminan de forma definitiva pero quedan deshabilitadas a la espera de que la demanda pueda cubrir esas plazas. Así pues, el saldo total positivo es de 21 aulas más.

Los centros de Gandia no salen demasiado bien parados de la propuesta de arreglo. Mondúber, Roís de Corella y Cervantes pierden una unidad de infantil. En ese mismo ciclo, el único que sube es Benipeixcar, que gana una aula habilitada. En primaria, se queda sin otra unidad el Roís de Corella, donde se habilitará una de la especialida de Comunicación y Lenguaje (CyL). En ese mismo nivel ganan unidades el Botànic Cavanilles y Les Foies (Grau). Mientras que Benipeixcar también también suma una en CyL.

La concejala de Educación, Laura Morant, apuntó al descenso de la natalidad que ha sufrido la ciudad en los últimos años la decisión del Consell de eliminar aulas en algunos centros de Gandia. En todo caso, indicó que «vamos a intentar no perder unidades», en tanto que a los centros aún les queda la posibilidad de presentar alegaciones. «A última hora casi siempre hay cambios, porque algunos niños se matriculan fuera de tiempo y tal vez podremos recuperar alguna aula».

Barx vuelve a ser el único municipio de la comarca en el que se habilita una aula de dos años, «de forma experimental», según aclara la Conselleria de Educación en el mismo documento. Esta unidad ya está funcionando durante el presente curso.