Gandia volverá a tener playa para perros el próximo verano. Se trata de ese espacio acotado en la costa en el que los bañistas pueden disfrutar del sol y el agua sin necesidad de tener que dejar a sus mascotas en casa. Es una iniciativa que goza de mucho éxito entre los amantes de estos animales. El ayuntamiento lo sabe, de ahí que, pese al debate que cada año se levanta entre los vecinos en torno a esta zona, lo vuelva a poner al servicio de los turistas año tras año.
Tras haber pasado por distintas zonas, la «playa-can» repetirá este año emplazamiento. Como en el verano anterior, estará ubicada a 375 metros de los últimos edificios de la playa, es decir, al norte del casco urbano, junto a las escuelas de surf y de kite sur y el inicio de la playa de l'Auir. El Gobierno local ha estudiado otras zonas pero finalmente no ha hallado un punto más adecuado para ella.
Este lugar levantó el pasado año el rechazo de los vecinos de las fincas más próximas, que esgrimían, entre otros motivos, problemas de aparcamiento e insalubridad que podía afectar la tranquilidad de sus viviendas.
Para atajar esos problemas, los responsables municipales adoptaron una serie de medidas que acabaron por contentar a los propietarios, como ayer explicaba el concejal de Gestión Responsable del Territorio, Xavi Ròdenas. Entre estas se encontraba la limpieza de la calle Ribera Baixa dos veces al día, la prohibición de aparcar vehículos en dicha vía para facilitar la entrada de los vecinos a sus casas y la apertura de una zona de parking al principio de la calle.
Estas condiciones se mantendrán para este año y se espera que en las próximas semanas se concreten otras medidas que se intentarán consensuar con los vecinos en futuras reuniones.
Conservar la zona protegida
La decisión del departamento de Turismo de mantener la playa para perros pegada a la zona urbana responde a dos motivos. El primero, alejarlo al máximo de la zona virgen de l'Auir, donde existe una flora y fauna singular que se pretende conservar. Por otra parte, también se pretende mantener la playa nudista del Auir, y se entiende que acercar un espacio con una gran afluencia podría ahuyentar a quienes practican esta modalidad.
La «playa-can», que se abrió por primera vez en Gandia en 2013, abrirá a partir del 15 de junio. Fuentes del departamento que dirige la alcaldesa, Diana Morant. aclaraban que, por mucho que desde el consistorio se quiera, resulta imposible ponerla antes en funcionamiento por el impedimento de Costas. En todo caso, la infraestructura para ofrecer el servicio empezará a instalarse a partir del próximo 1 de junio.
