Los padres del niño de 14 años que fue detenido a mediados de agosto acusado de robar en hoteles de la playa de Gandia al estilo spiderman han sido detenidos y puestos a disposición judicial como supuestos inductores para que el menor cometiera los 20 robos que le acusa la policía.

Como publicó en exclusiva Levante-EMV, la policía de Gandia buscaba a un delincuente que, por el procedimiento del escalo, estaba perpetrando robos en varios hoteles de la playa de la capital de la Safor. Lo que no se imaginaban los agentes era que se trataba de un menor de 14 años quien, supuestamente, robó en los hoteles Safari, Mare Nostrum, Riviera, Bayrén, Cibeles y Gandia Palace, entre otros.

Las investigaciones de la Policía Judicial han dado como resultado la detención de los padres del menor, un hombre y una mujer que se encuentran en paro, a quienes se les acusa de ser inductores para que el menor cometiera los robos. Es más, la niña de 12 años que la policía identificó como acompañante del pequeño spiderman es su propia hermana, a quien también supuestamente obligaban a acompañar a su hermano en los robos y así pasar mucho más desapercibidos en los hoteles justo en plena campaña estival.

La Fiscalía de Menores no ha podido imputar al pequeño spiderman los robos cometidos cuando era menor de 14 años, pero sí derivar la responsabilidad penal en sus padres, así como los que ha perpetrado tras cumplir esa edad.

Cuando la Policía de Gandia ha procedido a la detención de los padres y los ha presentado ante el juez, el magistrado ha dictado auto de prisión para el padre mientras que, en el caso de la madre, ha quedado en libertad con cargos dado que el juez ha tenido en cuenta la necesidad de que los dos menores tuvieran, al menos, la figura materna y no quedaran desamparados sin familia o en un centro de acogida de menores.

La labor policial ha sido muy compleja, tal y como publicó este periódico, dado que se tuvo que visionar las imágenes de las cámaras de seguridad de media docena de hoteles de la playa de Gandia en busca del ladrón.

Un cliente fotografió al niño

Para hallar al sospechoso la policía debía comprobar qué cliente aparecía en todos los hoteles haciéndose pasar por huésped, por lo que había que anotar el minutaje donde aparece cada una de las personas que entra y sale de un hotel un día de verano.

Pero como sucede en la película con el personaje de Peter Parker donde se buscaba una fotografía de spiderman, fue el cliente de un hotel quien se percató de cómo un menor subía trepando al balcón de un primer piso y le sacó una fotografía con su teléfono móvil.

Ya tenían el perfil y la imagen del menor y su hermana aparecía en los vídeos de los hoteles.

Estaban en paro y vendían las joyas

Se da la circunstancia de que los padres del pequeño «spiderman» no tienen trabajo y ambos hace tiempo que se encuentran en paro. Al parecer, el matrimonio ideó utilizar a los menores para cometer hechos delictivos, dado que, en el caso de ser sorprendidos, no serían detenidos sino reintegrados de nuevo al seno familiar quedando bajo la custodia de los padres. Cuando sus hijos comenzaron a robar y traer los botines a casa, la pareja optó por comenzar de forma discreta a ir deshaciéndose de las joyas provenientes de los robos. Para no levantar sospechas, en una ocasión el padre y en otras la madre, acudían a las casas de empeño de joyas de Gandia con el pretexto de la crisis y la necesidad de vender o desprenderse de las alhajas. Algunas de ellas han podido ser localizadas y, en otras, se ha comprobado que eran los propios padres quienes acudían a empeñar las joyas que sus hijos robaban.