Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Rafael Calatayud «Había indicios claros para investigar pero lo archivaron»

Rafael Calatayud, vecino de Catarroja, desapareció el 2 de septiembre de 1991 cuando se encontraba realizando pesca submarina junto a un conocido en la costa de Tenerife. La versión oficial es que se lo tragó el mar, pero los extraños movimientos de ese día del único testigo de su desaparición y las contradicciones en su relato ante las autoridades y el propio juzgado hacen que su familia esté convencida de que no se trató de algo accidental fruto del temporal.

«Desde el minuto uno sabía que jamás encontraríamos con vida a mi hermano», confiesa José. «Había indicios claros para investigar pero lo archivaron, y una vez archivado es muy complicado reabrir el caso», explica el hermano del desaparecido, quien considera que no se hicieron bien las cosas en un primer momento. «Tuvimos la mala suerte de que la jueza que llevó la investigación la inhabilitaron tiempo después por dejadez en otros casos», apuntó.

De hecho, la familia de Rafa critica que se tardara en llamar a los testigos y que el joven que se encontraba con él en la barca hinchable declaró cinco años después de lo ocurrido. A todo ello se suma «las 160.000 pesetas que mi hermano había sacado del banco poco antes de su desaparición y que no hallaron en la casa».

Compartir el artículo

stats