«A nosotros la crisis nos afectó de forma brutal porque somos un sector lúdico, pero aun así crecimos gracias a la expansión que comenzamos en 2007 en el extranjero» explica Francisco Martínez, quien junto a Salvador Armengal dirige actualmente la empresa valenciana Focs d'Artifici Europlá, renacida en 1997 a partir de una pequeña fábrica de pirotecnia de la localidad de Bèlgida, en la Vall d'Albaida.

A día de hoy, después de su apertura a nuevos mercados en 2007, mantienen una importante capacidad exportadora que abarca a más de ocho países como Inglaterra, Francia, Alemania y Austria entre otros, mientras que entre sus objetivos actuales se encuentra implantarse en Estados Unidos y Canadá. También aumentar su presencia en el país galo «por dos razones: por la proximidad entre Francia y España debido a que el transporte de explosivos requiere una seguridad que se traduce en un alto coste, y también porque el mercado francés suele centrarse más en la calidad del producto, en lo que destacamos nosotros, que en el bajo coste» señala Francisco Martínez.

Al margen de la venta de productos pirotécnicos, Martínez explica que también organizan espectáculos pirotécnicos y audiovisuales con una continuada participación en festivales de dentro y fuera de la Comunitat Valenciana como los de Cabo Verde, Hannover o Berlín, donde la empresa recibió el primer premio por su actuación en el Concurso Internacional de Piromusicales. Además, señala Martínez, «en diciembre de 2014 nos encargamos de los espectáculos de fin de año en las ciudades holandesas de La Haya y Rotterdam», eventos cuya realización ya tiene confirmada de nuevo la empresa valenciana para la celebración del fin de año de 2015.

La exportación, así como la contratación de los espectáculos a nivel internacional son, «sin ninguna duda» —afirma Martínez—, «los que más han contribuido al crecimiento de la empresa», que representan un 20% de los beneficios del total de una facturación que, prevén desde Europlá, será superior a los dos millones de euros al cerrar el presente año fiscal. Esto después de cinco años de aumento de los ingresos, a pesar de los efectos negativos de la crisis, y gracias al progresivo aumento de las ventas en los mercados exteriores. Durante ese lustro también «ha aumentado en un 50 % nuestra plantilla, teniendo actualmente veintiuna personas trabajando en la empresa entre personal de producción, oficinas y laboratorio».

Otro de los retos a los que se enfrenta la empresa de pirotecnia es la inversión en I+D, «por la que llevamos apostando desde antes de la crisis» también para acercarse cada vez más a la reducción de sustancias contaminantes «mediante un proceso de 'ecologización' de los productos de pirotecnia como la eliminación de los percloratos», lo que les ha permitido crear EcoColors, «la primera gama de colores ecológicos» que no contiene esa sustancia y que «es la principal contaminante de acuíferos», según explica Francisco Martínez. También incide en que «se trata de un proceso lento y muy caro mediante el que podemos convertir la pirotecnia en algo no excesivamente contaminante, pero siempre en distintas fases y teniendo en cuenta el gran coste que supone invertir para lograr unos productos lo menos nocivos posibles».

Francisco Martínez incide en un obstáculo que los espectáculos pirotécnicos encuentran en la Comunitat Valenciana: «Aquí nos encontramos con una soga legal en el tema forestal, con normativas que no tienen base científica» y que dificultan por tanto la contratación y realización de espectáculos, aunque «la situación actual es positiva y vamos remontando».

Por el momento, la empresa tiene confirmado su protagonismo en varios grandes eventos como el castillo del 9 d'Octubre y la celebración de fin de año en La Haya y Rotterdam, además de otros espectáculos.