Quién no viera el partido, al ver el 3-0 podría lamentar haberse perdido un festín blanquinegro. No es que el resultado sea injusto y abultado, pero hubo un punto de inflexión en el partido que resultó clave para decantar la balanza a su favor y hay que situarlo en el minuto 27 de partido cuando el árbitro expulsó a Sergi Darder. Hasta ese instante el Málaga salió respondón, con un inicio de partido en el que quisieron mandar, con Santa Cruz poniendo en serios apuros a Diego Alves. Soso Feghouli tuvo un remate de cabeza que desvió Kameni con el aliento para que el balón saliera rozando el palo.

Hasta aquí fue un partido, pero Estrada Fernández consideró expulsión una entrada de Darder a Parejo por entrar con los tacos por delante. Alucinó el Málaga con la roja, pero eso significó que dieran un paso atrás. Un excelente pase de Gayà, trazado con escuadra y cartabón, fue rematado a la primera por Paco Alcácer en un excelente demarque al primer palo para que el marcador alumbrara el 1-0. Le dio calma a un equipo sorprendido por el inicio visitante, y antes de retirarse a los vestuarios, un impetuoso Feghouli vio cómo le cortaban un balón dentro del área con las manos. No hubo dudas y aunque Parejo falló el penalti, no regaló el rechace. Vibraba Mestalla.

Todo iba inclinado hacia el primer triunfo de Nuno con el Valencia, pero ahí el técnico detectó el riesgo que conllevaba André Gomes, con una tarjeta y optó por el debut de Zuculini. Aún necesita tiempo el argentino, siempre bien asistido por Javi Fuego. Pero en una jugada aislada, con la línea defensiva mal colocada, Juanmi remató un centro a gol€ anulado por el árbitro asistente. Era gol, pero no subió al marcador, como sí hizo un minuto después el de Piatti. Buena conducción de Feghouli, que buscó a Alcácer, más listo que nadie, optó por ver la carrera de Piatti que remató de primera al fondo de la red. El 3-0 ya fue una losa demasiado grande para el Málaga. Nuno hizo que jugaran Carles Gil y debutara Rober Ibáñez en Primera, que estuvo cerca de marcar el cuarto gol. Hubiera sido la guinda para una noche redonda€ tras la expulsión de Darder. Con victorias es más fácil crecer.