José Luis Gayà entró ayer a la sala de prensa de la Ciudad Deportiva y puso el listón bien alto. De cara al partido de esta noche en Mestalla ante el Athletic, en el que el Valencia CF se juega su futuro en la competición continental, el lateral se mostró convencido de que su equipo afrontará el choque «como si fuera una final», decía, y se consideraba «favorito», añadió, para el encuentro.

«Hemos demostrado que ante los equipos grandes hemos rendido a muy buen nivel», explicaba Gayà, «por lo que si todos estamos juntos como ante el Madrid o el Barça, podremos pasar la eliminatoria. Ellos saben que no lo van a tener fácil. Mestalla va a ser un fortín y si apretamos de inicio vamos a tener muchas opciones de clasificarnos», señaló.

Y, en este sentido, Gayà, de 20 años, dio una vuelta más de tuerca a la intensidad con la que se debe afrontar el partido de la Liga Europa. «Vamos a ir a por todos los balones al máximo, vamos a salir a morderles de inicio, a que no jueguen. Mestalla debe ser una caldera que presione al Athletic», indicó, en clara alusión a la necesidad de que la afición se implique al máximo.

En este sentido, y sobre todo después de la derrota ante el Levante UD, el lateral de Pedreguer se mostraba convencido de poder transmitir su ilusión a la grada y que el partido ante el los de Rubi quedara en el olvido. «Lo tenemos que transmitir a la afición. Todos juntos será más fácil, confío en que podamos pasar. Pero está claro que lo que se ha dicho en el vestuario es que no se puede repetir la imagen del Levante, si jugamos así será muy complicado pasar la eliminatoria», indicó.

Gayà sabía de la importancia del envite. Y del buen momento de forma del rival, que no vendrá a regalar nada. Según explicó: « Nos jugamos casi toda la temporada en este partido y así lo estamos preparando. Sabemos sus puntos débiles y tenemos que aprovecharlos. El Athletic es un grandísimo equipo y lo que más me preocupa es su racha y que pueden jugar con un fútbol directo para Raúl García y Aduriz, pero también puede combinar con Beñat por dentro».