El expresidente del Valencia CF Manuel Llorente prestó ayer declaración en calidad de investigado por un presunto delito económico ante la Policía Nacional. El exdirectivo del equipo valencianista acudió acompañado de su letrado a dependencias policiales después de ser citado por los investigadores, evitando así la imagen de ser esposado y conducido a Jefatura como detenido, práctica bastante común ante este tipo de delitos no violentos y en los que el sospechoso se presta a colaborar con la Justicia.

Después de ser interrogado por agentes la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional, en calidad de detenido, según apuntaron las fuentes consultadas por este periódico, Llorente quedó en libertad a la espera de prestar declaración ante la autoridad judicial. Estas mismas fuentes indicaron que el expresidente del Valencia CF ha quedado como investigado -lo que hasta hace poco se conocía como imputado- en una causa abierta por un delito económico. No obstante, dichas fuentes no aclararon si se le imputa un delito de estafa o apropiación indebida.

Este periódico se puso en contacto con Manuel Llorente ayer por la tarde, tras conocer su puesta en libertad, para saber su versión sobre los hechos. Sin embargo, el exdirectivo del conjunto che negó rotundamente su detención aunque reconoció su presencia en dependencias policiales. Para tratar de justificar su visita a la Jefatura Superior de Policía Nacional de Valencia alegó que había ido «a renovar el DNI». Después de negar la mayor, Llorente, que dejó el cargo como presidente del club de Mestalla en 2013, rechazó hacer más declaraciones. «Me pilla ocupado, pregúntele a quien se lo ha contado», afirmó dando por zanjado el asunto.

Otra causa por delito societario

Esta no es la primera vez que el expresidente del Valencia tiene que rendir cuentas ante la Justicia. De hecho, el Juzgado de Instrucción número tres de Valencia abrió diligencias en 2013 por un delito societario, en referencia a la ampliación de capital del club en 2009, en la que figuraban varios exaltos cargos del conjunto che investigados, entre los que se encontraba el propio Manuel Llorente junto al exvicepresidente Javier Gómez, el presidente de la Fundación del club, Társilo Piles, y el expresidente de Bankia, José Luis Olivas. A principios de este año el juez acordó sobreseer la causa al no hallar indicios de delito societario, como informó en su momento Levante-EMV.

No el primer proceso judicial que protagonizan expresidentes del Valencia CF. En abril de 2014 la Policía Nacional de Valencia arrestó al exdirigente Juan Soler por organizar el intento de secuestro del expresidente Vicente Soriano, al que le reclamaba el pago de una deuda económica por la venta no abonadas de acciones del club. No obstante, el Juzgado de Instrucción número 12 de Valencia archivó el caso al no ratificarse el testigo protegido.