El consumo de agua, como el de otros suministros urbanos, es uno de los medidores económicos de las ciudades. En Valencia, los últimos datos sobre litros facturados por habitante del servicio del Ciclo Integral del Agua confirman un año más la tendencia a la baja en el consumo. Según recoge el Anuario Estadístico de 2010 del Ayuntamiento de Valencia, elaborado a partir de los datos estadísticos de 2009, el consumo medio por habitante y día se situó el año pasado en 156 litros, frente a los 160 litros del año anterior, esto es cuatro litros menos al día.
La crisis económica, el cierre de establecimientos comerciales y de restauración, así como las subidas o la aplicación de nuevas tasas en los recibos de los hogares se dejan notar en los consumos. Muchos valencianos se lo piensan más ahora a la hora de abrir el grifo del agua. Los responsables de la Concejalía del Ciclo del Agua atribuyen el descenso en el gasto de agua a un cambio de mentalidad en el ciudadano que ahora se preocupa más que antes por el medio ambiente y por el ahorro en los recursos.
Frente al descenso del consumo de agua, el número de abonados, tanto domésticos como industriales, se mantiene estable en 427.700 abonados tras varios años de aumentos significativos y continuados. En 2004, coincidiendo con la época de expansión económica y urbanística había 413.000 abonados en Valencia, que pasaron a 417.800 en 2005 y a 422.000 en 2006.
En consumo de agua también hay diferencias por distritos. Según recoge el anuario estadístico, donde más agua se consume es, por este orden, en Ciutat Vella, Campanar, Benimaclet y Pla del Reial. Los cuatro distritos superan la barrera de los 200 litros por habitante y día, circunstancia que podría estar vinculada a un mayor número de comercios, bares y restaurantes. El consumo en Ciutat Vella se sitúa en 294,7 litros por habitante y día. Le sigue Campanar con 254,8, Benimaclet con 226 y Pla del Reial con 219. En el otro extremo están Algirós, donde sólo se facturaron 95 litros por habitante y día y Rascanya, con 99 litros.
De toda el agua facturada, el 71% corresponde a los hogares, el 22,7% al sector industrial y el 5,9% a servicios municipales, como el baldeo y riego de parques y jardines mediante la red de baja presión.
El consumo de agua de Valencia quedaría, según los datos de la oficina municipal de estadística, por debajo de la media nacional que, según el Instituto Nacional de Estadística, se situó en 2009 en 157 litros por habitante y día.
El descenso en el consumo de agua podría obligar de nuevo a la empresa Emivasa, que gestiona el abastecimiento de agua de Valencia, a reajustar a la baja el suministro de agua. De los 123 millones de metros cúbicos producidos en 2005 se pasó a 108 millones en 2009.
Hogares con internet y coche
El anuario estadístico también analiza el grado de implantación de las tecnologías de la información en los hogares. El 75% de los valencianos tiene ordenador de sobremesa en casa mientras que un 62% tiene un portátil. Sin embargo, no todo el que tiene ordenador está conectado a internet, de hecho sólo el 52,7% de los hogares cuenta con conexión. De los que la tienen, el 96,4% opta por contratar la banda ancha.
En relación a la telefonía el móvil ha desplazado claramente al fijo. El 91,5% de los hogares tiene teléfono móvil, frente al 85% que cuenta con telefono fijo.
En relación a los hogares con coche, Valencia se sitúa con un 70% de hogares con vehículo por debajo de la media de España (76%) y de la Comunidad (79%).
El anuario estadístico refleja que la tasa de pobreza se ha incrementado en los últimos años, pasando de 122.000 personas por debajo del umbral de la pobreza (el 16% de la población) a 131.100 (el 16,5%)
