La Sindicatura de Cuentas ha elaborado un informe sobre la gestión del Ayuntamiento de Valencia y ha puesto reparos a la forma de contratación, el sistema de subvenciones o los adelantos de caja fija. En este sentido detecta, por ejemplo, que al final del pasado ejercicio no se habían justificado adelantos de dinero por valor de 147.918 euros.

Entrando en el detalle de las facturas analizadas, la sindicatura observa que hay anomalías graves en gastos de Alcaldía, concretamente en los gastos del servicio de escoltas. «No se identifica ni el perceptor ni el día del servicio, ni el CIF del perceptor. Los justificantes son tickets y no facturas. Y se han detectado varios justificantes duplicados del mismo día e importe por una cuantía de 2.158 euros», relata.

Por lo que se refiere a los gastos de restauración del Gabinete de Alcaldía, asegura que «no aparece el número de asistentes, los motivos del evento ni la forma de pago». Y se han detectado igualmente «donativos a una misma asociación por importe de 2.300 euros que supondrían una subvención directa, sin que conste la forma de pago». Por último, la Sindicatura habla de «compras de 240 euros sin que conste justificante ni concepto».

En el informe también se hace referencia a un expediente de la Policía Local en el que se observan gastos de desplazamiento por un importe de 4.593 euros, que exceden las cuantías establecidas por la ley. Y se hace constar un expediente de 40.000 euros en el que no se han justificado pagos por valor de 10.602 euros.

En definitiva, la Sindicatura de Cuentas concluye que todo estos hechos «reúnen los requisitos para considerarlos indiciarios de la posible existencia de responsabilidad contable y en consecuencia se podrán en conocimiento del Tribunal de Cuentas».

Por lo que se refiere a las subvenciones, la Sindicatura lamenta que el Ayuntamiento de Valencia no dispusiera de un plan estratégico de subvenciones. Detecta, por ejemplo, 4 expedientes de subvenciones a la Fundación VEO, el Palau de les Arts, a los premios Jaime I y al Pacto por el Empleo que deberían figurar nominativamente en los presupuestos dado su carácter repetitivo y su dudoso interés social.

También detecta una subvención de 1,2 millones para rehabilitar un edificio protegido del Cabanyal, obra que ya se ha hecho pero del que sólo se han hecho dos pagos. En muchos otros expedientes falta documentación, no hay memoria de la actividad o justificación del gasto, según el informe oficial.