La descentralización del servicio de reparto de metadona para los pacientes del departamento de salud del Hospital General en Valencia ha despertado la preocupación entre diversos colectivos del barrio de Sant Isidre después de conocerse que los tratamientos empezarán a entregarse «a partir de junio» en su centro de salud, según fuentes de la Asociación de Madres y Padres del colegio.

La Ampa del colegio Sant Isidre ha mostrado su preocupación tras enterarse, ya que el centro de salud está «puerta con puerta» con el centro escolar y los padres consideran que el traslado del servicio no es lo más adecuado «teniendo al lado niños de tres años».

Los medicamentos en el tratamiento de conductas adictivas se venían dispensando en el Hospital General de Valencia, de donde depende el centro de salud, aunque, como se está haciendo en todo el mapa sanitario, la nueva premisa es descentralizar el servicio y «dignificarlo» incluyéndolo en las diferentes Unidades de Conductas Adictivas (UCA). De hecho, los pacientes que siguen tratamiento en el ambulatorio de Sant Isidre ya acuden allí a por recetas pero, el paso más que supondrá el reparto de metadona ha generado inquietud.

«Aceptamos que el centro de salud tuviera una UCA hace ocho años con la condición de que no hubiera metadona pero ahora se han saltado el acuerdo y no queremos tenerlo puerta con puerta con nuestros niños de tres años», aseguró ayer Guillermo Sanchís, presidente de la Ampa. De hecho la asociación del colegio junto a otros colectivos del barrio como la asociación de vecinos, las tres escuelas infantiles y el centro de mayores han convocado una concentración de protesta el lunes. Los padres fueron informados en una reunión con los responsables del ambulatorio que explicaron que el cambio supondrá que 20 de los actuales 80 pacientes a los que tratan «pasarán diariamente» a por su medicación.

Fuentes de la Conselleria de Sanitat confirmaron que el cambio -para que el todavía no había «fecha concreta- obedece a un proceso generalizado con el objetivo de «dignificar» el tratamiento a estos pacientes y dar un seguimiento integral.