La reunión de asociaciones de vecinos de los barrios afectados por los apartamentos turísticos concluyó ayer con la clara exigencia de que este tipo de negocios sean clausurados en zona residencial. Russafa Descansa convocó ayer a los barrios históricos de Ciutat Vella y el Cabanyal-Canyamelar para aunar posturas ante esta problemática ampliamente denunciada este verano.
Así, tras el encuentro, Russafa Descansa señaló que el primer punto acordado fue «la defensa al descanso y a la vivienda digna» por encima de intereses «económicos» o «políticos». Del mismo modo, mostraron su «completa oposición a la modificación del PGOU», que pretende «legalizar» este tipo de servicios en zona residencial. La exigencia más contundente fue la de la «inspección de oficio, los expendientes sancionadores y la clausura de apartamentos turísticos en zona residencial», además del «cierre inmediato con carácter de urgencia de los casos denunciados».
Según anunciaron tras la reunión, todos estos puntos le serán trasladados y exigidos al responsable de la Agencia Valenciana de Turismo, Francesc Colomer, en un encuentro que tendrá lugar a finales de mes.
Este problema, arrancó en Ciutat Vella y se ha extendido a otros barrios como el Cabanyal y Russafa. En este último, como publicó este diario ya existen 450 apartamentos turísticos en 300 fincas residenciales. Los problemas que afectan a los vecinos tuvo como imagen icónica la fotografía realizada por una vecina del Carmen en la que varios turistas hacían botellón sobre los tejados de un edificio tras allanar la terraza de la denunciante. Los vecinos de los tres barrios, están en pie de guerra.
La Plataforma Salvem el Cabanyal-Canyamelar-Cap de França de Valencia también constituido esta semana el Grupo de Ayuda Mutua por el Derecho al Descanso „que ha definido como 'comisión sueño„ para coordinar todas las acciones encaminadas a conseguir «respetar los derechos fundamentales de los vecinos que viven con angustia continua» por el ruido nocturno en estos barrios.
