Una mujer de 80 años resultó ayer herida leve a causa de la caída de una de las puertas de la Basílica de la Virgen de los Desamparados, en la fachada del pasaje Emilio María Aparicio, que separa dicho edificio y la Catedral.

Las puertas de Octavio Vicente, -de cuatro metros de alto, 2,5 de ancho, y más de una tonelada de peso por hoja- que fueron instaladas hace 12 años, no soportaron al parecer la embestida de la gente que quería entrara a la Basílica para seguir la salida de la Virgen a la plaza.

Al menos ese era ayer el mensaje que lanzó el arzobispado. Fuentes de la institución señalaron a este diario que la muchedumbre golpeó con fuerza las puertas, de modo que una de las hojas dio a su vez con virulencia contra la pared, arrancando una de las bisagras, descolgándose y cayendo sobre la otra, que del peso también acabó fuera descolocada.

Aseguraban desde el arzobispado que las puertas estaban en buen estado y que habían sido revisadas «recientemente». Uno de los testigos del accidente, Alfredo, negaba esta versión y aseguraba que «al abrir la puerta se ha descolgado. La gente no estaba empujando. Han llegado a pasar unas personas y entonces se ha descolgado y ha golpeado a la mujer en la cabeza».

En los vídeos registrados, como el que Levante-EMV ha colgado en su edición digital, muestran cómo ambas hojas de la puerta golpean del mismo modo en las paredes, y solo una se descuelga, golpeando en su trayectoria una lámpara de grandes dimensiones y cayendo sobra la otra hoja. El escultor y miembro del Consell Valencià de Cultura Vicente Ferrero, impulsor de la colocación de las puertas, descartaba ayer un mal estado de las bisagras. «En su momento toda la instalación se dimensionó al tamaño y peso de las puertas. Es francamente imposible que se caigan... no lo entiendo. Podrían estar colocadas 100 años... es absurdo que se deba a una mala conservación».

Según señalaron fuentes sanitarias, la mujer, vecina de València y de 80 años de edad, recibió el golpe de una bisagra, provocándole una brecha en la cabeza. La mujer sangró abundantemente y fue necesario ponerle cuatro puntos. Fue trasladada al hospital La Fe para realizarle las pruebas protocolarias con el fin de descartar otras lesiones. Al mediodía la mujer ya había sido dada de alta del centro sanitario.

A la espera de la reparación

Bomberos, Policía Local y Cruz Roja actuaron rápidamente desalojando la zona y ayudando a la mujer herida. El operativo de seguridad provocó que la imagen de la Virgen tuviera que salir por la puerta central de la fachada, rompiendo con la tradición de hacerlo por la derecha, y ralentizó su encuentro con el público, al menos en un cuarto de hora.

Los bomberos aseguraron las puertas con cuerdas y el arzobispado se puso en contacto con un cerrajero para solventarlo lo antes posible. Está previsto que la reparación se prolongue durante el día de hoy, lunes.