Transcurridas varias semanas desde que se celebraron las elecciones catalanes, sigue sin producirse un acuerdo para formar gobierno.

ERC apoya al presidente Mas, con tal de sacar adelante su plan soberanista. Ese es el objetivo y el único punto de su programa político. Del resto de cuestiones: educación, sanidad, pensiones ,... ni mencionarlo.

El partido anticapitalista y rupturista que aboga por la colectivización de la propiedad privada, siguiendo el ideario marxista-leninista, La CUP es más reticente a investir a un presidente que está imputado por casos de corrupción y propone una presidencia rotatoria para los próximos cuatros años, si no hay elecciones antes, de tal manera, que un partido que ha sacado 10 concejales de un parlamento de 135 y que es la sexta fuerza política en la Cámara es determinante para formar gobierno.

Dicho esto con todos mis respetos hacia las minorías, pero es que resulta que las diferencias ideológicas entre ambos partidos son abismales. Mientras los primeros representan a la burguesía catalana democristiana, la Candidatura de Unidad Popular que encabeza Antonio Baños es un partido antisistema y antieuropeo, que aboga por la salida del euro y de la Unión Europea. El partido de Mas siempre ha hecho una defensa a ultranza de Europa y se ha declarado europeísta.

La CUP va a tener muy complicado convencer a su electorado, si finalmente decide votar sí a la investidura de Artur Mas como president de la Generalitat, cuando siempre ha negado su apoyo.

Anteponer el plan soberanista a cualquier otra cuestión parece ser la estrategia que quiere seguir la CUP para votar sí a su investidura. Y luego, qué? ¿Qué pasará cuando la amalgama de partidos políticos que integran la lista de Junts pel Sí desde Convergencia Democrática de Catalunya, Moviment d' esquerres hasta ERC pasando por la CUP tengan que aplicar sus programas electorales?.