Mañana domingo día 8 se abre la caza para la perdiz en Fontanars dels Alforins. También para el resto de especies cinegéticas: conejo y liebre. La apertura de la veda se ha retrasado unas semanas, con la intención de que caiga toda la hoja de la vid y la perdiz tenga más defensa y sea más difícil su captura. Sin embargo, aún queda mucho pàmpol en las viñas, lo que la convierte en presa fácil.

Me consta que hay cazadores que no saldrán mañana a la perdiz y preferirán ir al zorzal. Es una manera de quitarse el gusanillo y de no acabar con lo poco que queda.

Desde hace unos años a esta parte, la perdiz ha entrado en franco declive como consecuencia de muchos factores. En esta larga retahíla de factores que podríamos enumerar, ninguno beneficia a la perdiz: 1.- PÉRDIDA DE CALIDAD DE SUS PRINCIPALES HÁBITAT. 2.- PRÁCTICAS AGRÍCOLAS ANTIFAUNA. 3.- REPOBLACIONES INCONTROLADAS CON PERDICES DE GRANJA 4.- ESCASA RENTABILIDAD ECONÓMICA DE LA GESTIÓN. 5.- EXCESO DE PRESIÓN CINEGÉTICA 6.- EXCESIVA PRESIÓN PREDADORA. 7 .- DECLIVE DEL CONEJO. 8.- PRÁCTICAS GANADERAS EXCESIVAS. 9.-FALTA DE APLICACIÓN DE PLANES DE ORDENACIÓN CINEGÉTICA. 10.- CONDICIONES METEOROLÓGICAS ADVERSAS Y CAMBIOS CLIMÁTICOS.

La penosa realidad es que la especie reina por antonomasia de la caza menor está en claro retroceso hasta el punto de peligrar su especie. Y algo habrá que hacer al respecto, si no queremos enseñársela algún día a nuestros nietos en fotografías de papel cuché.

En esa importante labor de recuperación de la perdiz autóctona tenemos que estar los cazadores. Como tantas otras veces, la labor de recuperación corresponde a los cazadores. Recuperar la especie depende de lo que hagamos en los próximos años y de la política cinegética que queramos implementar en nuestros acotados.

Sólo en aquellos cotos que se ha hecho una buena gestión cinegética perdura la especie y se ven bandos abundantes. En el resto de acotados diseminados por la geografía española se pueden contar con cuentagotas. Y Fontanars no es ninguna excepción.

El año pasado no se cazó la perdiz y este año se ha visto algún bando. Muy poco o casi nada en relación con lo que había años atrás. Pero tendremos que armarnos de paciencia para ver de nuevo a las patirrojas, apeonando por los campos y barbechos. Abrir la veda para la perdiz es desde mi modesto punto de vista un grave error. La veda debería prolongarse, al menos, tres años más. Pero, lógicamente, no basta con dejar de cazarlas sino lo complementamos, además, con otro tipo medidas dirigidas a su conservación.

Estas son algunas extraídas de un estudio:

1.- INICIACIÓN DE UNA ESTRATEGIA NACIONAL PARA RECUPERAR LA PERDIZ CON IMPLICACIÓN DE LOS MINISTERIOS AFECTOS. 2.- ACTUACIONES DE MEJORA DEL HÁBITAT. 3.-LEGISLACIÓN DE MEDIDAS QUE SUBVENCIONEN SÓLO LAS PRÁCTICAS AGRÍCOLAS Y GANADERAS PROFAUNA. 4.-LEGISLACIÓN DE NORMAS RESTRICTIVAS SOBRE USO FITOSANITARIOS. 5.-CONTROL DE PERDICES PARA REPOBLACIONES. 6.-DISMINUCIÓN DE PRESIÓN CINEGÉTICA. 7.-CONTROL GLOBAL DE PREDADORES, INCLUSO RAPACES. 8.-INCREMENTO DE ESPECIES PRESA EN EL COTO. 9.-PLANES GLOBALES DE ORDENACIÓN Y EXIGENCIA DE CUMPLIMIENTO. 10.- CREACIÓN DE AYUDAS A COTOS QUE GESTIONEN LA CAZA DE LA PERDIZ CON MÉTODOS Y NORMAS DE CALIDAD ESPECIALES.

La tarea es ardua, pero si nos ponemos a trabajar valdrá la pena el esfuerzo.