Por desgracia, los casos de maltrato animal no cesan. Suma y sigue a una espiral de violencia que no tiene fin y que se ceba en animales indefensos. Hoy leíamos en este mismo periódico que tres personas han sido detenidas en un pueblo de Sevilla por dejar morir de hambre y sed a varios animales. Perros, caballos y burros han sido localizados en un estado agonizante. La fotografía que ilustra la noticia con un caballo desnutrido y famélico, que fallecería poco después es espeluznante.
La detención se ha producido gracias a las redes sociales por la denuncia de varios vecinos, que colgaron tanto en Twitter como en Facebook fotografías de alguno de estos animales casi moribundos.
Por desgracia también estos días conocíamos la noticia de que el individuo acusado de matar a golpes a su caballo ha salido de prisión, tras permanecer entre rejas un mes. La condena era de 8 meses de cárcel.
Esta misma semana, en un pueblo de Valencia, el acusado de dejar morir a varios animales ha sido condenado a una multa de 90 euros.
Países como Francia, Italia, Reino Unido o Suiza tienen una legislación penal mucho más dura que la española, donde, por ejemplo ,el maltrato animal está tipificado con tres años de cárcel como contempla la legislación francesa. Y es, incluso, la propia Constitución la que reconoce el derecho de los animales.
En España todavía andamos a años luz de nuestros socios europeos.
