Tanto el PSOE como Ciudadanos han estado a la altura de las circunstancias, llegando a un acuerdo entre ambas formaciones políticas, que recoge 200 propuestas para que el cambio en este país sea posible. Ni el PP ni Podemos se han querido sumar a ese cambio y siguen empecinados en bloquear cualquier iniciativa que vaya en esa dirección. Ellos sabrán por qué.

Todos los periódicos calificaban hoy de fracaso la investidura de Pedro Sánchez, sin embargo, yo no la tildaría de fracaso sino de un acto de valentía y generosidad para tender puentes entre dos partidos como son Ciudadanos y PSOE, que más allá de sus diferencias ideológicas, que las tienen, se han sentado a negociar y han llegado a puntos de encuentro, sin pensar en el coste político que pudiera tener dar ese paso, que algunos no han tardado en criticar.

Y en definitiva en eso consiste la democracia. Diálogo, pactos y acuerdos porque por encima de los personalismos y de los intereses de partido está el interés general.

El PSOE y Ciudadanos lo han tenido claro desde el primer momento y como demócrata me felicito por ello. Ambos líderes han salido fortalecidos y la democracia también.