Entre los artistas suele pasar a menudo que no se dan cuenta de que han llegado al ocaso de su carrera y prefieren morir en el escenario antes que claudicar y retirarse a tiempo. Aunque al final la historia ponga a cada uno en su sitio.

También en el mundo de la política pasa algo parecido. El señor Rajoy debería comprender que se ha convertido en una rémora para su partido y que como dice el refrán , una retirada a tiempo es una victoria.

De cara a las próximas elecciones generales del 26-J sería un error que repitiera como candidato. Esta apreciación mía la comparten muchos expertos, que dicen que el señor Rajoy está ya de salida.

Mariano Rajoy se puede sentir muy fuerte y con mucho ánimo como él mismo dice, pero me temo que la mayoría de votantes del PP preferiría otro candidato, que no le de pereza participar en los debates y que no le tiemble la mano para atajar los casos de corrupción.

Me consta que el PP tiene gente muy válida al frente del partido para afrontar los nuevos retos que tiene España por delante y que, desde luego, no son nada fáciles, con un horizonte bastante incierto desde el punto de vista económico y social, con previsiones del PIB a la baja y con avisos desde Bruselas para nuevos recortes.

El señor Rajoy ha cumplido una etapa con sus luces y sus sombras, que de todo ha habido y debería dar un paso al lado y facilitar una nueva transición en el PP, como se ha hecho en otros partidos.

Todas las encuestas vaticinan un resultado similar al 20-D, por lo tanto, va a ser necesario buscar pactos para formar gobierno porque en nuestro sistema parlamentario no gobierna la lista más votada sino aquella que cuente con los apoyos suficientes para formar una mayoría parlamentaria que permita aprobar las leyes. Y es obvio, que los españoles no están por nuevas mayorías absolutas, visto lo visto.

Es muy probable que nos encontremos en un escenario similar. La duda es si se dará el "sorpasso" en la izquierda y la coalición Podemos-IU, a pesar de haber sido refrendada por un alto porcentaje, pero con una escasísima participación de los militantes arrebatará al PSOE la hegemonía de la izquierda. La hipótesis de una gran coalición PP-PSOE- Ciudadanos se desvanece, si el señor Rajoy sigue liderando el PP y es de nuevo el candidato.

Si me acepta un consejo, no espere a ver qué pasa el 26-J, váyase antes porque usted es hoy por hoy el mejor aliado para que Pablo Iglesias y sus confluencias den la gran sorpresa en las próxima elecciones generales.