Los vinos de Terres dels Alforins han sido muy bien valorados por Robert Parker en su prestigiosa revista "The wine advocate". No ha sido directamente Parker quien los ha catado sino su hombre en España, Luis Gutiérrez. Varios vinos de la zona aparecen con un notable alto (93 sobre 100): Simeta y Micalet blanco de Javier Revert; Maduresa de Pablo Calatayud; 1771 de Casa Los Frailes y Cambra uno y Casa Boscá de Rafa Cambra.

Un reconocimiento muy merecido a una hornada de enólogos e ingenieros que han apostado claramente por este territorio para aportar lo mejor de ellos mismos y parir, si me permiten la expresión, vinos de una calidad excelente, con una personalidad propia. A los ya citados anteriormente se podrían mencionar otros muchos como: Sentada sobre la bestia y Mujer Caballo, de Fil.loxera & Cia; La Sort de Bodega Los Pinos o Escribanos Cepas viejas de Cooperativa La Viña.

Un buen elenco de caldos y de referencias, tras el cual se esconde mucho trabajo y sacrificio; muchos de ellos elaborados a partir de variedades autóctonas que se creían ya desaparecidas como: la forcallá, la mandó, la arco o la bonicaire, recuperando parcelas de cepas viejas de más de 40 años que iban a ser arrancadas por la falta de rentabilidad de estas uvas y empleando técnicas de vinificación antiguas como la fermentación en tinajas enterradas de barro, que le confieren al vino un carácter muy especial.

El trabajo de muchos años está empezando a dar sus frutos en el difícil y competitivo mundo vitivinícola, donde sobrevivir y abrir nuevos nichos de mercado es cada vez más difícil. La apuesta clara por la calidad y el carácter diferenciador de sus vinos hacen que cada vez sean más reconocidos y demandados.

A Terres dels Alforins y a ese magnífico triunvirato formado por Fontanars dels Alforins, Moixent y La Font de La Figuera le queda todavía un largo camino por recorrer. Seguro que seguirá dándonos enormes satisfacciones y alegrías.