La polémica sobre las antenas de telefonía móvil ubicadas cerca del colegio Cervantes, de la Vall d'Uixó, ha vuelto a reactivarse con las protestas de los padres de alumnos, como denunció ayer el concejal socialista Manuel Jorge Ballester, que afeó al equipo de gobierno por "haberse olvidado del problema tras llegar a la alcaldía". Desde el PP afirman que están a la espera de la orden del juez para retirar las antenas, ubicadas en terreno privado.

Ballester apunta que "nos hacemos eco de las protestas de los vecinos del colegio". Y recuerda que "hace 4 años, en septiembre de 2006, que la asociación de madres y padres de alumnos (AMPA), de la que era directiva la actual dirigente del PP, Sara García, comenzaron las protestas, utilizando y manipulando niños y padres, llegando a denunciar el tema en un programa televisivo, donde dieron una visión burlesca de la Vall". Esas protestas "duraron lo que el gobierno socialista de Josep Tur. Ahora está claro que todo era una estrategia del PP, porque con Isabel Bonig de alcaldesa, las antenas siguen aquí, pero las protestas ya se han terminado".

Recuerda que la semana pasada, la concejala de Interior Elena Vicente-Ruiz dijo que "hace un año que esperan la orden judicial para quitarlas... Otro lío. El recurso presentado por el ayuntamiento para quitarlas lo es en base a la Ordenanza Municipal anulada por el TSJ de la Comunitat Valenciana".

Vicente-Ruiz indica que "hemos trabajado muy duro en este tema desde que asumimos el gobierno, porque era muy importante recoger las sensibilidades de las partes implicadas". Recuerda que está prohibida la instalación de estas infraestructuras en espacios sensibles (centros docentes, centros de salud y hospitales).

Explica que "uno de los compromisos del PP, era regular la situación de las antenas. En la oposición, tuvimos reuniones con el AMPA" para tratar el asunto.