Tanto la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Castelló (Fapa-Penyagolosa) como la Confederación Gonzalo Anaya anunciaron ayer que pedirán un cambio en las instituciones «para garantizar la equidad en el sistema educativo público valenciano y el derecho a una educación pública, de calidad y en valenciano; una escuela pública que rechace el pensamiento único y garantice la pluralidad, huyendo de cualquier tipo de adoctrinamiento».

En este sentido, los representantes de las Ampas están ultimando una agenda de reuniones con todos los partidos políticos al objeto de entregarles una hoja de ruta y un escrito con las reivindicaciones de las familias. A su modo de ver, si no se da un golpe de timón en la política educativa, el sistema de enseñanza pública está en peligro.