El Ayuntamiento de Tírig está recurriendo en los últimos años al Ministerio de Cultura para hacer posible la investigación sobre las pinturas rupestres del barranco de Valltorta. Así, el Gobierno de Madrid, ha concedido 50.000 euros a un proyecto liderado por la localidad del Maestrat. El objetivo es hacer posible que se vean en cuatro dimensiones las pinturas rupestres de Valltorta, pero también las de los términos municipales de Benassal, Coves de Vinromà, Ares del Maestrat, Albocàsser y Ulldecona (Tarragona).

Durante este año ya se han tomado fotogorafías con la técnica 4D, lo que permitirá que las pinturas rupestres se puedan ver en altísima resolución, con un detalle mucho mayor que si se observan a tamaño real.

Los primeros trabajos se han desarrollado en la Cova dels Cavalls (Tírig); Cova Centelles (Albocàsser); Cingle dels Tolls del Puntal (les Coves de Vinromà); Cingle de la Gasulla (Ares del Maestre, Castellón); y abrics I y V de l'Ermita (Ulldecona, Tarragona).

La ayuda permitirá continuar con las labores en Coves del Civil (Tírig), Cova del Llidoner (Coves de Vinromà), Racó de Nando (Benassal), les Dogues (Ares del Maestrat) y Ermites I y V (Ulldecona).

El objetivo pasa por obtener una documentación integral del arte rupestre, diagnosticar su conservación mediante técnicas de termografía, detección de cambios volumétricos y con la comparación de cambios de alteraciones.

Según explica el científico impulsor del proyecto, Juan Francisco Ruiz, el objetivo es detectar cualquier mínima alteración de las pinturas rupestres, además de crear una base de datos con imágenes en alta resolución. El objetivo pasa por la investigación científica, pero también por disponer de una potente herramienta de difusión en museos como el de Valltorta.

Para llevar a cabo las imágenes en la mayor resolución posible la cámara se situa todo lo cerca que permite su ubicación frente a las pinturas. A todo ello se añade el análisis termográfico. Con cámaras que captan el espectro infrarrojo de la luz se determinan las temperaturas superficiales de la roca donde se asientan las pinturas rupestres. De este modo se determinan las alteraciones existentes en los paneles que albergan las pinturas rupestres. La técnica de la fotografía infrarroja se utiliza desde hace poco para identificar las posibles patologías que presentan las pinturas rupestres.

El desarrollo del proyecto implica la intervención de arqueólogos, químicos, ingenieros, geógrafos especialistas en teledetección y de geólogos. El Museu de la Valltorta está trabajando en coordinación con el equipo técnico. Su responsable, Josep Casabó, ha manifestado el máximo interés del museo de referencia en el arte rupestre, para colaborar en todo el desarrollo de la iniciativa.

Estas pinturas albergan la historia de la humanidad desde hace más de 7.000 años en forma de escenas cotidianas.