Rafael Esparza era aficionado a la cría de canarios y en una heladería empezó a ofrecer jaulas con pajaritos. Ante el éxito de esta iniciativa decició levantar una pajarería y tienda de mascotas. Esta apertura se realizó hace casi medio siglo. Su nuera, Vicenta Felip, recogió el testigo y desde 2004 lo regenta en solitario. Esparza, situada en la calle San Vicente número 50, es la pajarería más antigua de Castelló y uno de los pequeños comercios señeros del centro de la ciudad. Se ha adaptado a la evolución de los tiempos y entre los aficionados a las mascotas continúa siendo una de las tiendas punteras de Castelló y de su entorno.
Incluso ha recibido clientes de Teruel, subraya Vicenta. ¿Cómo ha logrado mantenerse en activo 50 años? «Con mucho cariño a la hora de atender a la gente y con buenos precios», resalta la propietaria, que añade que también se valora que «tenemos de todo». «Me conocen como la pajarería de toda al vida», sostiene. Pajarería Esparza ha de convivir con negocios nacidos en las grandes superficies comerciales, pero Vicenta destaca su atención personalizada y el asesoramiento». «Ha venido gente de centros comerciales a pedirme luego consejo», asevera.
Pajarería Esparza conserva su nombre original, pero su oferta más allá y engloba un amplio y variado surtido de mascotas. Se pueden encontrar acuarios con peces, tortugas, tritones (un pequeño reptil), cobayas o hámsters, además de todo tipo de accesorios relacionados con el mundo de las mascotas. Asimismo, es posible adquirir perros por encargo.
Vicenta subraya que la pasión en la actualidad por las mascotas es similar a la de hace medio siglo, pero destaca que ahora, además de una cuestión capricho, tiene una finalidad terapéutica. Según explica, las mascotas sirven en algunos casos a los niños para suplir la falta de compañía de sus padres, ocupados en sus trabajos. «Una clienta me dijo que a su hija le había dado al vida», remarca al responsable de Esparza, que reseña que hay médicos que aconsejan mascotas para los más pequeños.
En aves hay canarios, periquitos o amazonas. El canario es de temporada y el resto está disponible todo el año. «A la gente le gusta sobre todo las aves que puedan domesticar», señala Vicenta.
En materia de peces hay de mar tropical como el escalar o el Molly Balón; de agua fría como carpas o shubunkin; o especies japonesas tales como cabezas de león. En canes, las razas que más se solicitan son las más pequeña, entre otras, yorkshire, chihuahua o bichón maltés. El establecimiento completa las mascotas con complementos. Hay champús, perfumes y gafas para perros o toallitas higiénicas. Para las fiestas de la Magdalena, Pajarería Esparza tiene preparado un traje magdalenero diseñado específicamente para un perro. Vicenta está acompañada por su perrito, del que recuerda emocionada el reciente fallecimiento de su madre.
La tienda tiene futuro ya que la hija de Vicenta y nieta del fundador se hará cargo de la misma.
